Yo fui a la tienda dudando seriamente si comprarlo o no, precisamente por lo de la reducción de tamaño, pero una vez lo tienes en las manos te das cuenta que no es para tanto. Con este material de los noventa no hay tanto problema a la hora de reducirlo porque los dibujos son más grandes y hay menos viñetas por página que en los comics de los sesenta o los setenta. Es la época en la que se ponen de moda las
splash y progresivamente se van eliminando los cartuchos sobrecargados de texto, así que un formato como este del CES es bastante cómodo de leer

En cuanto a la edición en sí, a mí personalmente me ha encantado el papel que han escogido, muy flexible y que reproduce estupendamente las tintas. Si se mantiene el mismo nivel de calidad en los próximos volúmenes, creo que me los voy a comprar todos...
