Anoche en La 2 tuve ocasión de volver a ver
"La tentación vive arriba", del maestro
Billy Wilder. Sin ser, por supuesto, una de sus mejores pelis, sigue gustándome cada vez que la veo (porque sigue pareciéndome divertidísima).
Tom Ewell está sencillamente genial (esa cara es perfecta para la situación) y
Marilyn... bueno, Marilyn (para bien y para mal) siempre será Marilyn.