Si a Hickman se le notaba inspiradísimo en sus 4F! Sabemos que el tío hizo un currele de un buen tiempo leyéndose todo lo hecho hasta la fecha sobre el grupo, preparando su manifiesto, y haciendo planes a muy largo plazo.
Es una etapa en la que vemos por fin como el grupo recupera esos aires de explorar lo desconocido y recuperar importancia, dándole relevancia, algo que en otros autores modernos solo vemos en la etapa inicial de Waid y Weiringo. Hickman no dice "voy a inventarme un superhéroe cutre noventero que ponga en apuros a los 4F", no, coge a los putos pesos pesados de la editorial, y los lanza sin tapujos. Volvemos a esos aires de grandeza y de aventura hacia lo desconocido que en el grupo no veía desde la etapa de Simonson! Pero todo ello sin perder el toquecito humano, lejos de sentimentalismos de mercadillo que ya podemso ver en todo el mercado. ¡Ah! Y no se me olvide hablar de que Hickman, al contrario que la gran mayoría de escritores de los 4F, no se sienta en una silla y dice "¡Ala! ¡Nadie ha escrito nada antes que yo, asi que vamos a volver al status quo de Stan Lee y Jack Kirby!", no, con Hickman vemos una sensación de avance, de que se respeta lo trabajado por Millar (de hecho, una de las creaciones de su etapa aparece por aquí dando la lata) y que de veras se pretende hacer madurar a Johny y a Franklin, sin olvidarse del Doctor Muerte, que aunque aparece más en segundo plano, tiene un par de momentazos durante la etapa.
Eso sí, no todo es perfecto. Para mí lo malo de la etapa es lo poco sólido que es el apartado gráfico, con un enorme baile de dibujantes. Se habría agradecido que Hickman mantuviese a Epting o a Eaglesham, que es una debilidad personal.
A mí por todas estas razones, y algunas más, me parece una etapa estupenda y recomendable. Vamos, en resumen, es lo más dcita y metatextual que se ha hecho con el grupo en toda su historia. Me gusta tanto que, en vista de los planes de Panini, he tenido que comprar las grapas, y ahí están luciendo en la estantería.