Magnífico remake del clásico de 1958, con un Jeff Goldblum en sus mejores momentos (tampoco ha tenido muchos más), un gran trabajo de efectos especiales (básicamente, maquillaje y efectos visuales), y buenos escenarios y banda sonora. Para mí, la mejor película de Cronenberg (al menos, la que más me ha gustado).
Un 7,5 muy merecido.
Pd: De la "secuela", La mosca II, mejor ni hablar...