Día 43: WildCATs

Ains, qué recuerdos del desembarco de Image en España... Andaba por aquella época algo cansado de los cómics marvel del momento, y comenzaba a plantar mis primeros pinitos en el coleccionismo de cómics.
La primera serie a la que me acerqué fue ésta (junto con Spawn, claro

) Y fue precisamente la impresión que me dejó este rollazo daemonita-kerubin lo que me hizo engancharme al resto de colecciones Image: Savage Dragon, Maxx, Cyberforce, Youngblood, Backlash...
Ahora bien: el motivo por el que ADORO este cómic es por la sencilla razón de que me descubrió nada más y nada menos que a Alan Moore (y a Travis Charest

). Como ya se ha comentado, los personajes eran básicamente copias remozadas de otros personajes, aunque a pesar de ello, desprendían bastante carisma (ese Grifter, sobre todo codo a codo con Backlash en The Kindred

). Sin embargo, a poco de comenzada la colección, los personajes andaban bastante perdidos, y sobre todo, atascados: ni la historia ni los personajes avanzaban por la sencilla razón de que no se sabía cómo llevar la colección y como sacarle jugo al pasado de los personajes o al contexto de la guerra daemonita-kerubin... hasta que llegó Moore. Su etapa, dentro del contexto de la colección, fue GENIAL. Trasladó al grupo original a su planeta de origen con la finalidad de deshacer el nudo que evitaba que la historia se desarrollase, y creó a su vez un segundo grupo de wildcats para que operaran en la Tierra durante la ausencia del grupo original, los cuales resultaban ser unas mil veces más interesante que los primeros.
Y qué decir de los lápices de Charest en esta étapa, sobre todo en los últimos episodios... menuda maravilla

Y una vez se fue Moore, la serie volvió a ser lo mismo: un pastiche de otros cómics sin historia que contar. Incluso con el maestro Claremont al mando y todo.