Byrne fue uno de los autores que más aprovechó todos los recursos que tenía a la hora de dibujar. Fue un pionero, utilizando técnicas como el formato apaisado (o "cómic en cinemascope", durante
Viaje a la Zona Negativa, cuyo ejemplo más reciente lo tenemos en los Nuevos X-Men de Morrison), o la división de la página, para contar dos líneas argumentales diferentes (ejemplo: el regreso de Ben Grimm del planeta de las Secret Wars, que Byrne nos narraba al mismo tiempo que Reed y Susan sufrían el ataque de una hechicera- y de Mefisto- y del ataque de los enemigos de Rom a la Tierra). Aquí Byrne nos da una muestra más de su genialidad a la hora de componer las páginas, que se mezcla a la perfección con la narración.
Susan Richards se había quedado embarazada de nuevo durante la mencionada saga de la Zona Negativa. Las radiaciones de esa dimensi´pon afectaron al bebé, y estas a Susan. Desesperado Reed trató de conseguir a los mayores expertos del mundo en radiación, incluyendo a un por entonces debilitado Doctor Octopus. A lo largo del número veíamos como Reed trataba de que Octopus se uniera a al equipo de ayuda, y justo cuando lo conseguía, justo cuando llegaban al hospital, Byrne daba un golpe de efecto impresionante: Susan había perdido al bebé. Reed había peleado durante páginas para traer a los mejores para ayudar a su mujer y a su futuro hijo, pero no había servido de nada. La desgracia, la soledad de Reed ante tan fatídica noticia, se refleja a la perfección en esta composición. Sorpresa absoluta, la peor noticia del mundo, golpea a Mr. Fantástico y a los lectores.
Fue un duro golpe para Susan, y supone un paso más en la fantástica evolución del personaje, que llegaría a su clímax unos números más adelante, con la llegada de Malicia y Psico-Man.
PD: Si alguien quiere saber más sobre estos 4Fantásticos post-Secret War (justo después, a decir verdad), y sobre el desarrollo de ese número que se lea el apartado Spider-Man y las Secret Wars de
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