Namor es uno de los mejores personajes que tiene Marvel.
Estoy de acuerdo con quien me diga que tiene una personalidad algo difícil de digerir en primer momento. Un personaje arrogante, sabelotodo y de "mandíbula cuadrada" no entra lo que se dice fácilmente. Pero si nos paramos a mirar un poco más, y dejamos atrás esa primera impresión, nos encontramos con un personaje lleno de carisma, de presencia, de poder, de muchas lecturas... Un personaje indispensable en el entramado del universo Marvel.
Fue uno de los primeros y llegó para quedarse, manteniéndose con frescura y fiel a su esencia durante muchas décadas.
No comparto para nada la idea de que da lo mejor de sí como personaje invitado. Para mí da lo mejor de sí mismo en cualquier serie, momento o situación, siempre y cuando la habilidad del guionista acompañe. Yo no puedo quedarme con una opción, si tengo que elegir entre sus encontronazos con los Cuatro Fantásticos, su lucha al lado de los Defensores o sus aventuras en solitario protegiendo a Atlantis, por poner algunos ejemplos de todas las situaciones que ha ofrecido el atlante.
Y es que ante todo es eso, un atlante. Sí, es un híbrido, pero su corazón y su lealtad están con su pueblo. Se habla de la capacidad de Victor Von Muerte para liderar su país, y sin duda al pensar en reyes de Marvel, Thor y T'Challa son sin duda los primeros en muchos de los casos. Pero Namor es el mejor de todos ellos, dándolo todo por su pueblo, siendo este último lo más importante para él. Solo de pensar en un entorno algo más elaborado, como ha tenido Thor y sus compañeros asgardianos a lo largo de los años, se me cae la baba (todo ello sin desmerecer a secundarios como Dorma y Vashti, e incluso Krang y demás).
Y no puedo escribir este indigno comentario sin mencionar una palabra que define muy bien a Namor desde cierto punto de vista: Poder. Otros personajes, como Thor y Hulk, ofrecen auténticas viñetas para el recuerdo cuando entran en acción, pero Namor es especial. Es más grácil, menos bruto pero igualmente eficaz. Su poderío, y especialmente bajo el lápiz de John Buscema, es digno de verse y es una experiencia que cualquier aficionado debería tener grabada a fuego en su retina.
Cambiando un poco de tercio, no puedo dejar de comentar el aspecto más estético. El diseño de Namor es único, con esas orejas puntiagudas y sus alas en los tobillos (aspecto compartido por la simpar Namorita, a quien ya comenté cuando tocó). Su look más típico, el del bañador de escamas verde… bueno, he leído críticas que lo tachan de hortera o cosas peores, pero debo admitir que para mí es definitorio del personaje, y el primero que me viene a la mente cuando pienso en él. No obstante, el diseño de su traje negro me parece muy bueno y acertado para según qué ocasiones. Eso sí, cualquiera que sea su indumentaria, cuando porta su tridente o su corona impone como pocos.
Finalmente, me gustaría resaltar el componente trágico de este personaje. Aunque él trate de ocultarlo, es un personaje muy torturado, cuya felicidad siempre le es arrebatada. La pérdida de su pueblo en más de una ocasión, la muerte de su madre y su amnesia, todo orquestado por Paul Destine, su amor no correspondido por Sue Storm, su resentimiento hacia la raza humana, la pérdida de dos esposas, sus problemas de temperamento a causa de ser un híbrido. Todo ello aporta la tragedia que define a un buen héroe Marvel, que lo hace luchar contra las adversidades.
Namor es uno de los mejores personajes Marvel, y este modesto comentario no puede ni siquiera empezar a rascar la superficie de todo lo que puede llegar a ofrecer. Saludemos todos a Namor I y exclamemos…
¡IMPERIUS REX!