43. DEADSHOT
Considerado uno de los más grandes tiradores en el universo DC, la puntería de Deadshot está a la par con la de Ojo de Halcón o Bullseye, de Marvel. Con un par de cañones con silenciador en las muñecas, Deadshot afirma que nunca ha fallado un tiro. Y aunque no tiene superpoderes de los que podamos hablar, su mortal precisión de tiro puede suponer un problema hasta para los competidores más fuertes o rápidos.
Apareció por primera vez en Batman #59 y fue creado por Bob Kane, David Vern Reed y Lew Schwartz. Al principio parecía que Deadshot había llegado a Gotham para convertirse en un nuevo luchador contra el crimen, pero se reveló como enemigo de Batman cuando intentó reemplazar a este. Batman y el Comisario Gordon le mandaron a la cárcel e hicieron público su plan para convertirse en el rey del crimen organizado de Gotham.
Cuando su tiempo en prisión terminó, se convirtió en un asesino a sueldo, y cambió su frac por un nuevo atuendo, que remató con una máscara de metal equipada con un objetivo sobre su ojo derecho.
La característica más definitoria de Deadshot es su deseo de morir de una forma espectacular. Ese fue su principal motivación para unirse al peligroso Escuadrón Suicida, y fue durante su temporada en ese equipo cuando John Ostrander profundizó en su turbulento pasado. Se descubrió que su actitud hacia la muerte podía ser atribuida al odio que sentían sus padres entre ellos y el terrible giro del destino que le llevó a matar accidentalmente al hermano al que tanto quería.
También es conocido por tener una fuerte lealtad hacia su propio y retorcido código ético. Una vez que ha sido pagado para realizar un disparo, siempre lo lleva a cabo… sin excepciones.
42. TALIA AL GHUL
El origen de Talia nunca ha sido tan importante con respecto a su vital papel en la mitología de Batman. Lo que importa es que es la hija de Ra’s Al Ghul, y que está locamente enamorada del Caballero Oscuro. Puede que sea la líder de la infame Liga de Asesinos, pero es un poco más complicada que el villano medio. Su motivos son normalmente puros, aún cuando sus métodos no lo son, y ha sido de gran ayuda para Batman y otros héroes de vez en cuando.
Su madre murió cuando ella era muy joven, y fue criada por su padre, quien la entrenó para convertirse en su ayudante en la gestión de sus vastas operaciones. Es una experta en artes marciales, capaz de defenderse con o sin armas, y como su padre, puede ser resucitada en su red de fozas de Lázaro ocultas.
Talia se encontró con Batman por primera vez cuando su padre quería determinar si Bruce Wayne sería un pretendiente adecuado para ella, y por tanto para heredar su imperio. Batman rechazó tomar parte en ninguna de las dos cosas, pero no antes de que Talia se enamorara de él.
Desde entonces, ambos han tenido diversos encontronazos, tanto directos como indirectos. En particular, fue Talia quien usó la fosa de Lázaro para revivir a Jason Todd, el segundo Robin, y le ayudó a embarcarse en una campaña de venganza como Capucha Roja. Y aún más a su favor, Talia es una de las pocas personas que ha engañado con éxito a Lex Luthor, estableciéndose como jefa de LexCorp después de que Luthor fuera elegido presidente de los Estados Unidos, y usando esa oportunidad para revelar sus crímenes al mundo.
41. MONGUL
Pregunta: ¿Quién ha logrado no solo estar a punto de derrotar a Superman (en su propio hogar, nada menos), sino también hacer lo mismo con Batman, Robin y Wonder Woman? Respuesta: Mongul. No dejéis que el azul y el poco elegante amarillo de su atuendo os engañe, Mongul es alguien a quien hay que tomarse en serio. También es alguien cuya fuerza bruta solo rivaliza con su imponente ego.
Siempre intentando poner sus manos encima de una súper arma, como un rayo mortal destructor de planetas, Mongul ha luchado con Superman en infinidad de ocasiones sin importarle tener una victoria absoluta. Y es que en sus esfuerzos por superar a aquellos que considera por debajo de él, Superman se ha convertido en un frecuente oponente suyo.
Podría decirse que lo más cercano a una victoria que ha logrado Mongul se vio en “El hombre que lo tenía todo”, de Alan Moore. En esa historia, decidió acabar con la vida de Kal-El en el día del cumpleaños de este, usando un dispositivo similar a una planta que puso a Superman en un estado permanente de sueño… un estado en el cual las visiones de los mayores deseos de la víctima le atrapan en una prisión de ilusiones. Su plan habría tenido éxito, si no hubiera sido por los esfuerzos de Batman y Robin y de Wonder Woman. Pero el hecho de que lo intentara, y que en solitario llegara a estar tan cerca del éxito, es la principal razón por la que el universo DC debería temerle siempre… incluso estando en el puesto 41.