Un dibujante nada espectacular pero muy cumplidor. Unos dibujos muy simples, pero cabe destacar su destreza para los rostros faciales. No me desagrada su dibujo, pero ha tenido el inconveniente de coincidir con verdaderos monstruos del lápiz como John Romita Sr, John Buscema, Gil Kane, Neal Adams o Gene Colan, y claro, no hay comparación posible.