Bueno, pues ya está. Se acabó. Ya se ha visto el "cambio de cromos" y, aunque el primero me lo olía, por muy poco sentido que tenga, viendo su peso en el universo Ultimate, el segundo no me lo esperaba: ¡era la mejor razón para leer Supreme Power!
En cuanto a lo que acompaña a este último número... en fin, que podían habérselo ahorrado y haberlo dividido entre las respectivas series porque no merece la pena pagar porque el amigo Loeb te destripe su primer número de una forma tan descarada...