Reseña que no le importará a nadie.
Me he leído los seis primeros números de la serie de Destructor Nocturno publicada en los 90, y como los 12 primeros aparecieron en España como una serie limitada, he llegado a la mitad de ella y es buen momento para ver qué tal ha sido la cosa.
Mi conclusión es clara: Guión muy bueno, dibujo... dejémoslo en mejorable. MUY mejorable.
De esta década se dicen muchas cosas malas, pero muchos guiones estaban a la altura, y este es un caso.
El primer número está relacionado con una de las más importantes tramas de los Nuevos Guerreros, y la verdad es que es necesario para entendarla del todo pero no imprescindible. Además, se inicia una línea argumental que durará hasta el número 4, y la verdad es que me ha sorprendido gratamente. Madripur, un mafioso llamada Lobo Salvaje, el regreso de Fuego de medianoche y el Círculo Envolvente (otro grupo infravalorado con posibilidades)... muy entretenido todo, aunque vaya con el dibujo...
El número 5 es quizá el que más me ha gustado. Autoconclusivo, muestra una batalla de Dwayne contra la Fuerza Aérea liderada por Cardenal (y de la que formara parte Urraca Asesina anteriormente), pero sin su armadura, completamente desprotegido, y además en un avión de su fundación en pleno vuelo.
Y finalmente el 6, de nuevo autoconclusivo, y mostrando una historia concisa y directa que critica la intolerancia racial con bastante buen resultado. En este aparece Rabia, compañero de los Guerreros.
Una impresión muy positiva me he llevado de esta serie, a pesar del dibujo. A ver la segunda mitad, con la resolución de la subtrama de Bandido y la participación en el crossover "Una y otra vez", con Nova y los New Warriors.
