De Supergirl: La mujer del mañana #7 (de 8) por Tom King
“Y así, con ese bombardeo sin precedentes, Supergirl cayó del cielo hacia el planeta de abajo. Comenzó a notar el calor de la reentrada y sintió una sensación de confort. Le trajo recuerdos de Krypton, de cómo vio a su padre sobrecalentando la parrilla láser. Podía verlo corriendo por la cocina diciéndole que todo estaba bien, que lo tenía controlado, pero que no se lo dijera a su madre cuando llegara a casa. Supergirl sonreiría sabiendo que había conseguido algo de su padre que no muchos consiguen: un secreto.
Y mientras seguía cayendo y las llamas la abrazaban aún más, vio arder su casa, vio arder a sus padres, vio arder su mundo. Hasta que lo único que quedó fue ese secreto y nadie a quien poder contárselo”.