Yo he leído los dos tomos del tirón, y si bien los he disfrutado, los he visto muy, muy verdes a nivel de guion, con muy poca consistencia.
Fenomenal dibujo, magnífica atmósfera, estupendo ritmo de aventuras y un corte romántico y marinero que me ha encantado. Pero lo que es la historia, para mí no tiene ni pies ni cabeza.
El Monje, Rasputin, Corto, Cráneo, Cain, Pandora o Slutter, tan pronto se intentan matar unos a otros como se ayudan y se dan abrazos de amistad en los que todos se quieren mucho. No entiendo los continuos cambios de personalidad de unos y otros, ni comprendo la gracia de la historia en sí, que más allá de una isla escondida en mitad de la Guerra y dos rehenes, no cuenta realmente nada. Los personajes se dedican a dar vueltas sin que la trama avance en una dirección concreta; ahora nos escondemos, ahora negociamos, ahora nos vamos de la isla, ahora volvemos...
Esperaba algo más sólido a nivel narrativo, si bien los personajes desprenden carisma a cada viñeta. Pero lo veo muy lejos de guión de otras obras europeas de la época, como Blueberry o después Ken Parker. Mientras que en esta cada aventura es una historia perfectamente hilvanada en la que todo encaja, aquí no temo decir que no se entiende el va y ven y ven y va de los personajes.
No obstante tiene sus momentos, tampoco quiero que parezca que no me ha gustado, pero vaya, no se sostiene.