Ninguna de las tres es perfecta, pero con la primera disfruté porque por fin se podía ver a Spiderman en una película digna y bien hecha. Los antecedentes eran los bodrios de los 70 con el "Spiderman flacucho en pijamilla", y ésta hizo que se me cayera la baba. Eché en falta más apariciones de Spiderman, pero el origen me pareció narrado de forma excelente (la picadura de la araña, el descubrimiento de los poderes, la muerte de tío Ben, sus primeras apariciones públicas...)
En la segunda Spiderman apareció más y lo pudimos disfrutar más, sobre todo en esa magnífica escena en la que combate al Dr. Octopus en los rascacielos y en el tren. Para mí la más espectacular, la mejor hecha y la más cercana al cómic. Como punto negativo, que casi aparece más con máscara que sin máscara, y sobre todo el tema de la identidad (todos los del tren la ven la cara, y hay demasiados personajes que averiguan que Peter es Spiderman).
Y en cuanto a la tercera, ya la he comentado en varias ocasiones: bajón de calidad con respecto a las otras dos. Muy bien hecha y muy espectacular, pero con más errores y sinsentidos (el cambio de versión del asesinato del tío Ben, sobre todo; la caida en el lado oscuro de Spiderman excesivamente absurda e infantilizada; los monólogos y diálogos con la tía May, que en la primera estaban bien, pero en ésta ya resultan empalagosos y aburridos; el poco o equivocado desarrollo de la personalidad de los villanos -poco en el caso de Veneno, equivocado en el del Hombre de Arena-)
En fin, ninguna de las tres es perfecta, pero las dos primeras son en mi opinión de lo mejorcito que se ha adaptado de Marvel (junto con X-Men 2 y Iron Man).