Por eso intento centrarme en lo positivo y en lo que ECC dice.
Ciertamente, no sabemos cuál es el peso de los costes fijos, pero sí sabemos que esos costes (traducción, maquetación...) es independiente del número de volúmenes impresos. Y también sabemos que, cuántos más libros se impriman, menos pesa esa partida en el precio final, baja.
Puede ser que esté equivocado pero las imprentas requieren un mínimo de ejemplares y, a medida que aumentan los mismos, el ratio por libro impreso, baja.
En cuanto el ajuste a la baja, ¿quiere decir que ECC pone dinero, asumiendo parte del coste del mecenazgo? ¿Sin publicitarlo, esto es, sin ponerse la medalla?
Si nos atenemos a lo expresado por ECC, entendemos que los mecenazgos están planteados sin beneficios, sólo para cubrir los costes de producción, eso no quita que con el de los Titanes, que ha sido más de dos veces cubierto, hayan ganado dinero. No sabemos si mucho o poco.
Resumiendo: no llamemos amor a lo que no es más que sexo. Esto es un negocio y es una forma que tiene ECC de no asumir riesgos. Se trasladan los mismos al consumidor, que tiene que adelantar el dinero sin saber, además, si el producto va a llegar en condiciones.