¿Cuando se ha visto un equipo satisfecho con caer en cuartos de final y presumiendo de que otro equipo ha ganado la final como si fuera el suyo propio?
Para comprenderlo es necesario saber que el mayor mérito histórico del Mc Carnigan's Dream hasta la fecha había sido pasar de primera ronda.
Unos pueden hacer balance de su torneo con dignidad y otros se convierten en filiales. Diferencias.
Te pongo un ejemplo para que lo entiendas.
Supongamos que no fueses un manager tan absolutamente pésimo y te fichasen como entrenador en un equipo de 1ª División.
¿Si el Madrid (club que se supone que admiras) llega a la final de Champions contra el PSG y la gana, rabiarías como un condenado, clamarías al cielo y te rasgarías las vestiduras en público? ¿O te alegrarías porque en esencia los buenos han ganado a los malos y el fútbol se ha impuesto?
Afinemos un poco más: supongamos que durante dicha final, un grupo de 11 terroristas armados saltan al campo, toman como rehenes a los jugadores del Real Madrid y amenazan con que si no se elimina el mundo del fútbol en las próximas 24 horas los ejecutarán; y los jugadores del Real Madrid se resisten a sus captores y terminan por derrotarles, salvando así el deporte rey. Imagino que lejos de celebrarlo se te llevarían los demonios, porque son un rival liguero y alegrarte de cualquier victoria por su parte supone convertirte en su mascota oficial.
Pues eso es lo que ha pasado aquí, amigo
Valores.
Enhorabuena, Essex