Sobretodo es sorprendente que el argumento de estas historias se las inventaban Stan Lee y Jack Kirby en 15 minutos en una charla informal. Luego ya sería un proceso de improvisación sobre la marcha de Kirby al dibujar el tebeo y, posteriormente al escribir los diálogos, el añadido de Stan Lee de dos ó tres detallitos más.
En cambio ahora para una historia puede necesitarse el brainstorming de varios guionistas, planificación de meses (según algunos), reuniones con el editor... total para que en un arco de 6 números apenas te cuenten una chorrada que, frecuentemente, te suena a refrito de otra anterior.