Incógnito empieza muuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuy bien, remedo de El club de la lucha en la oficina, con la mejor parte de Norton de toda la peli. Pues aquí igual. Recuerda a Ray Liotta hablando desde el programa de protección de testigos en Uno de los nuestros también.
El tramo final no está a la altura, sí, pero deja todavía muy buenos ramalazos de pulp puro con experimentos de científicos locos y poderes.
A mí me gusta bastante, sin ser de las mejores de ellos.