He visto Campeones.
La primera mitad es decente, pasable, incluso buena. Presenta las bases del film, deja varios momentos entretenidos y traza un rumbo que puede dar bastante juego.
La segunda mitad es decepcionantemente barata, obvia y condescendiente, sin ningún interés o talento. Uno de los peores ejercicios de cine profesional que habré visto en los últimos años, aderezado por la reiteración constante, a puñetazo limpio, de escenas forzadamente dramáticas acompañada por una deliciosa selección de las mejores bandas sonoras de telefilms de Antena 3 para sus momentos más lacrimógenos. No soporta el más mínimo análisis, carece de técnica, de credibilidad, de inteligencia y de estilo.
No sé qué es peor, si que un equipo de discapacitados que en su primer día no saben correr ni pasar un balón en un mes y medio ya estén en un campeonato nacional ganando partidos (toma insulto a todos los deportistas del mundo, que saben que la progresión es lenta, costosa y muy esforzada), que la mujer del protagonista tenga que mencionar que quiere un bebé en cada frase que dice o que cada 5 minutos de metraje se imponga una lección sobre moralidad al espectador, tanto si viene a cuento como si no.
Como producto en sí mismo pues le concedo un generoso 5 porque entiendo su valor a la hora de llegar al gran público, y si cambia la mentalidad de alguien pues ese trabajo que llevamos adelantado, pero como ejercicio cinematográfico es pobre de solemnidad. De las nominadas a mejor película en los Goya me parece la peor con holgada diferencia (salvo por Entre dos aguas, que no la he visto) y ni siquiera entiendo sus múltiples nominaciones, más allá del mensaje y de quedar bien ante el público.