Es cierto que Mc Carnigan no tiene ni la más mínima puta idea de cine, pero hasta un reloj estropeado da la hora correctamente dos veces al día.
El rollo antiPrometheus aburrió a los cinco minutos de estrenarse la peli, tanta sobreactuación de algunos de sus haters (incluyo a todos y cada uno de los foreros con los que tengo confianza y a Omnigold como bandera) no denota otra cosa que un pauperrimo bagaje cinematográfico, una miserable vida cultural y, en general, una atroz falta de sexo.
Ridley os robó la Navidad, pero superadlo ya, cansinos.
Atentamente.