La conclusión debería ser entonces: "No compréis MLE, niños".
Ni las primeras ediciones de ciertos OG, ni MG de Vengadores, ni...
Yo la verdad es que si quiero algo lo compro, porque hasta ahora, desde 2010, Panini nunca había dejado tirado a un cliente de clásicos.
Mostraba una confortablemente aburrida previsibilidad.