Yo hoy me he permitido el lujazo de regalarme una tarde con el Don, el mismísimo Vito Corleone.
El Padrino.
Sin querer ofender a nadie, pero quien diga que esta película es mala, mediocre o sobrevalorada, con todo el cariño, no tiene puta idea de cine. Y si alguien "solo" dice que no le gusta, más vale no hacerle caso ni para comprar pipas

Qué contador de historias, qué bestia estaba hecho Coppola esos años. Qué ritmo, qué fuerza narrativa envidiable, qué cuadro de costumbres de la mafia siciliana y los italoamericanos de los 40. Y qué putos bichos reunió. Qué fuerza de la naturaleza era Marlon Brando.
He estado casi todo el rato sonriendo. Y ahora viene esto, y esto, y lo otro. Y la verdad, no sé con qué escena quedarme. Son todas tan poderosas, con diálogos e interpretaciones tan potentes, que cuesta. Quitando las grandes de Sonny, las de la boda, y mi preferidísima del bautizo (una película que entre sus muchas simbologías comienza con una boda prometiendo matanzas, y las cumple en un bautizo, haciendo una especial lectura cíclica de los ritos cristianos tan presentes en la cultura italiana), me la pone muy dura en escenas como cuando Don Vito hace de consigliere para su hijo Michael
("quien te diga que quiere reunirse...") , o la intriga y tensión brutal del restaurante italiano.
Una película de 10, por más cliché que sea decirlo.