No soy seguidor del programa, ni me interesa la temática, pero de lo poco que vi (5 minutos) el año pasado me desagradó profundamente el tono de perdonavidas de los que evaluaban los platos.
No puede ser que en un programa que no te juegas nada los concursantes estén temblando como flanes a la espera de lo que van decir unos tíos que tendrán mayor o menor conocimiento pero que no dejan de ser personas con sus opiniones acertadas o equivocadas.