A mi también me parece más flojillo este número que los otros dos que ya habíamos disfrutado, volviendo a ver a un Land descafeinado. Al final el tema de extremis que dejó dos buenas historias el número pasado, acaba ahora de manera un poco cutre en lo que al final ha acabado por ser por ahora un compendio de aventurillas sueltas para justificar los cambios de armadura de Iron man.
La nueva aventura en el espacio encuadrada dentro de las consecuencias de V VS X, de primeras me atrae, aunque veremos a ver como la desarrolla durante los siguientes números.