Una de las cosas que más me costó de asumir cuando decidí reintroducirme en este mundillo, tras años y años simplemente releyendo mis retapados de los años 80, fue esa sensación de dibujo plano, de colores lisos, de fondos pulcros. Lo comparaba con mis antiguos comics y el granulado de aquellos, los colores apagados, la tetracromía (creo que se decía así) me gustaba más. Esto lo acuso, sobre todo, con las reimpresiones de clásicos; aunque, por el tipo de diseño y dibujo, no lo noto tanto con los modernos. Pero bueno, me voy acostumbrando.
El de Graduación lo estoy disfrutando bastante. Que no se olviden de los clásicos en esta colección, que a mí esta proporción de cada cosa que meten me está encantando, máxime cuando ya se contempla meter continuaciones, otra buena idea que a mí me ha fidelizado al coleccionable.