Anoche me leí el Giant-Size Spiderman 3 en su primera edición de Vértice. La historia no pasa de entretenida, con ciertas lagunas argumentales. Lo gracioso es que, con tanto problema como están causando los derechos, Doc Savage y Spiderman no se cruzan en ningún momento de la historia.
Sí, es curioso. Algo parecido ocurre con Spiderman y Drácula en el Giant-Size 1.
En el de Spiderman y Doc Savage, no deja de ser original la manera en la que está contada la historia (cada uno en su tiempo, ya que pertenecen a dos épocas distintas del Universo Marvel. Ross Andru soberbio, como siempre.
Por otro lado, me estoy leyendo la BM Patrulla X y me gustaría comentar la etapa de Stan Lee y Jack Kirby.
Confieso que esperaba que fuese bastante más chunga, algo así como los primeros números de Thor (deleznables), o sin llegar a ese extremo, bastante más floja. Y no es que sea la panacea ni mucho menos, el origen mantiene ese aire ingenuo, e incluso infantil (aquí más acentuado, al tratarse de adolescentes) que tienen prácticamente todas las series Marvel en sus orígenes. Pero al menos no hay "amenazas comunistas" ni argumentos excesivamente inverosímiles. Los enemigos de la Patrulla X suelen ser otros mutantes. Asistimos a la primera aparición de Magneto, Mente Maestra, la Mole, Mercurio, la Bruja Escarlata, el Sapo, Unus el Intocable... Es decir, la base del universo mutante. Como siempre, Stan Lee y Jack Kirby demuestran una capacidad creativa inigualable.
Como elemento negativo (por farragoso y repetitivo, más que nada), tenemos aquí un tema recurrente en muchas de las series de la época: el amor imposible entre el chico y la chica (en este caso, Cíclope y Jean). Ocurrió igual en Daredevil (con Karen Page), en Thor (con Jane Foster), en Iron Man (con Pepper), incluso al principio en los 4F (entre Reed y Sue). Y no es que fueran amores imposibles, sino que al parecer a Stan Lee le encantaba el "ojalá me quisiera, pero no me quiere"
Por otra parte, como punto positivo, se nota cuando Lee y Kirby le cogen el truco a los personajes. En ocasiones inoculan dotes de dramatismo como sólo ellos saben (equivalentes a las mostradas en otras series). Por ejemplo, la primera aparición del Juggernaut provoca la sensación de amenaza imparable que tan bien saben explotar Lee y Kirby, como (salvando las distancias) la llegada de Galactus en los 4F o la primera aparición de Mangog en Thor.
En definitiva, que pese a ser producto de su época, el origen de la Patrulla X no me ha defraudado en absoluto. Y aún no he leido la primera aparición de los Centinelas, que viene justo a continuación, ya en el tercer tomo, donde Werner Roth colabora con Kirby, siendo finalmente su dibujante sustituto.