He leído
One Piece Nº 92.
Retomo la lectura de la serie tras mi
comentario.
Como ya adelantaba, parece que la serie está cogiendo impulso en su edición española, con la publicación de tomos prácticamente de manera mensual. Si bien es cierto que no se publicó nada durante la primera mitad del año, tampoco creo que sea necesario publicarlo todo junto. A veces pienso que el parón que tuvieron nuestras vidas en marzo algunas editoriales quieren recuperarlo de golpe, lo cual no sé si eso es bueno para el mercado, aunque en el caso de Planeta, con una división de cómics tan mermada quizá es diferente. Más allá de mi reflexión, y coincidiendo con la opinión general de nuestro querido
fanpiro, este tomo me ha gustado mucho, dejándome intrigado como va a avanzar la trama. Todavía es pronto para opinar de forma rotunda, pero con lo poco que he visto hasta ahora de esta saga, me reafirmo que es de lo mejorcito que hace Oda en las últimas aventuras. A mí me recuerda en ocasiones a algunos de los momentos más interesantes de la colección en su dirección a Water Seven o la gran guerra. Me cuesta entender la negatividad que he leído en algunos compañeros que van más avanzado en la lectura. Para mí, esta saga, por el momento, es puro One Piece en todos los aspectos. Habrá que ver como evoluciona la trama y los distintos personajes, pero yo hacía tiempo que no disfrutaba tanto con la entrega de un volumen de esta serie, que ha mostrado ciertos altibajos en los últimos años, cuando antes tenía una calidad muy lineal.
Como bien dice
fanpiro, en esta entrega tenemos el final del primer acto, un pequeño preludio y el inicio del segundo. Yo también opino que en el segundo acto Oda se desata demasiado con la división de los personajes y el cambio de escenas casi de forma continua. Es su sello de identidad, qué duda cabe, pero ya he comentado en otras ocasiones que cuando abusa de lo que debería ser una virtud, la historia se diluye y el lector acaba un poco perdido. No sé como será esa sensación leyendo un capítulo a la semana, pero incluso en un recopilatorio como este, la presentación de personajes y los cambios de escenario acaban siendo un verdadero follón. Eso, junto al pelea de Sanji en la fase final de este tomo, me parecen los aspectos más negativos hasta el momento. Lo de Sanji es quizá peor incluso que la pérdida del argumento lineal, porque entiendo que tras hacer las paces con su familia pueda emplear su tecnología, además de estar justificado por querer ocultar su identidad, permitiendo que el resto de la banda sea descubierta. Pero lo cierto y verdad es que es una barrabasa sin demasiado sentido, que va en contra de todo lo que el propio personaje piensa, y que verbaliza incluso, admitiendo su odio a los Germa. En algunos momentos, me ha recordado al tono humorístico de Son Gohan cuando hacía de superhéroe enmascarado, incluso veo ciertas similitudes en el diseño del traje. Y es que ya está todo inventado, parece...
Aunque he empezado por el final, creo que merece hacer un pequeño repaso de los contenidos de este tomo desde el principio. De hecho, tenemos un inicio con muchísima potencia, ya que tenemos nada más y nada menos que el enfrentamiento entre Kaido y Luffy. Kaido tiene la capacidad de transformarse en un dragón, así como sus hombres lo hacen en otras bestias tal y como se está viendo a lo largo de la saga. A medida que vamos avanzando en el organigrama de la banda vemos que hay dinosaurios y todo. Yo no tengo claro si esto es debido a una fruta demoníaca, que supongo que sí, pero hay una escena en la que se hace referencia a Momonosuke, que también tiene esa habilidad, aunque a menor tamaño, por lo que no termino de entender si Oda pretende decirnos algo con eso, o simplemente deja un misterio en el aire para más adelante. Sea como sea, Kaido es gigantesco ya sea como dragón o persona, y está borracho y cabreado con la banda de sombrero de paja, por lo que su aparición obedece a su deseo de acabar con ellos de una vez por todas. Ojo al diálogo del emperador, porque nos traza la hoja de ruta de lo que han sido las aventuras de Luffy y su amigos, cuyo plan inicial era acabar con una serie de negocios en los que Kaido estaba metido para así llamar su atención. Podemos decir que ha sido todo un éxito este ataque a uno de los cuatro emperadores, por lo que esta saga sería el desenlace de una trama que se viene cociendo a fuego lento desde hace ya bastantes capítulos. Para mí, esto es lo que hace de Oda un gran autor, capaz de planificar algo con tanta antelación, pero sobre todo por su capacidad para que todo acabe encajando bien.
Kaido, borracho o no, es muy peligroso y Basil Hawkins le señala que podrían estar en el viejo castillo de Oden, no se lo piensa dos veces y lo destruye todo. Aunque explica que lo dice al azar, con la intención de evitar la destrucción del pueblo por parte de su jefe, a mí me da la sensación de que sabe algo más. No sé, me da a mí que este personaje incluso podría cambiar de bando. Sinceramente, soy incapaz de explicar mi interpretación de sus movimientos a lo largo de este volumen, pero es la que he tenido. Posíblemente esté equivocado, claro. Luffy ve el ataque a sus amigo, lo cual le enfurece, así como la
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No obstante, Luffy, ajeno a todo esto, y lejos de hacer caso a Trafalgar Law, que creo que está siendo consciente de lo dificil que es planear algo con el sombrero de paja, se lanza sobre Kaido en una pelea algo irregular, pero muy interesante. Y digo irregular, porque en un principio, sospecho que por la borrachera de Kaido, este encaja una serie de golpes que lo lleva a su forma humana, pero después,
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Law consigue escapar, para que así se reagrupe la banda, siguiendo el plan de mantenerse infiltrados hasta la batalla final, que se prevé descomunal, sobre todo teniendo en cuenta la cantidad de personajes implicados, y los que se van sumando poco a poco.
Por cierto, como broche final de este bloque, vemos como
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Oda realiza un pequeño paréntesis en la saga para mostrarnos a otros viejos conocidos, como es el caso de Perona y Mihawk, que al igual que otros están muy pendientes de lo que sucede en la reunión mundial. Incluido Barba Negra, que recibe la visita de Gecko Moria. Desde luego, el poder que está amasando Barba Negra es descomunal, robando poderes de frutas a tantísima gente. Además, está al tanto de lo que sucede en el país de Wano, anunciando algo que veremos justo al final del tomo y que añade aún más interés a esta saga si cabe. Tengo ganas de ver quién y cuando hará frente a Barba Negra y los suyos, en lo que yo pienso que podría ser el final de la serie algún día...
El segundo acto es un follón de cuidado, sobre todo para resumirlo aquí trama a trama. Yo creo que lo podemos resumir perfectamente en que la conspiración para acabar con el sogún sigue en marcha, con los miembros de la banda infiltrados, lo que nos permitirá conocer un poco el país de Wano, su diferencia de clases y todo lo concerniente a una traslación del japón feudal a la dinámica de la serie. Injusticias por todos lados, hambre, pobreza y los ricos son muy ricos y los pobres son muy pobres. Nada nuevo bajo el sol, vaya. Todo comienza a torcerse cuando Sanji es atacado por tener un puesto de fideos en un barrio que pertenece a uno mafiosos de la Yakuza. Aunque son derrotados con cierta facilidad, el patriarca de la familia les ordena que acaben con él como sea. Entonces entra en escena uno de los cuerpos de élite de la banda de Kaido, en la que se nos presenta a Page One y Drake. El primero será el adversario de Sanji, que ocultará su identidad de un modo algo curioso, tal y como comentaba al principio. Yo soy uno de los aficionados que tenía muchas ganas de ver a Sanji en acción, ya que apenas ha protagonizado peleas desde hace tiempo, al menos una más o menos en condiciones. Esta, desde luego, no me está convenciendo, porque más que sus habilidades parece que vayamos a ver principalmente
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Por otra parte, los otros miembros infiltrados, salvo Zoro, que parece ir un poco a su bola en plan ronin, veremos como se desempeñan en sus labores de investigación, siendo quizá
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Por su parte, Luffy protagoniza su particular drama carcelario. Aunque, en realidad, se podría decir que no lo está pasando precisamente mal, ya que él y Kid hacen lo posible por demostrar su fuerza en lo que se supone que es un castigo, trasladar piedras, y consiguen acabar con las provisiones de la prisión. A pesar de estar encadenados con piedras marinas, demuestran que ambos son muy fuertes. Y también que se llevan bastante mal. La prisión es también un lugar de rescate para ciertos personajes como Caribú, que parece interesado en participar en una fuga y aliarse con Luffy. Por otra parte, tendremos episodios dedicados a dos personajes que no habían aparecido hasta el momento. Uno de ellos es Orochi, el sogún de Wano, un tipo despreciable que abusa de su poder por el simple hecho de contar con Kaido. Además, no solo es corrupto, sino que parece muy interesado en Vegapunk. El otro personaje es la cortesana Komurasaki, que es una mujer decidida a aprovechar su belleza en este país tan complicado para sobrevivir. No sabría decir si es malvada realmente, aunque le destroza la vida a muchas personas. A mí me ha dado por pensar que podría ser
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. Desde luego, tiene toda la pinta.
Finalmente, tenemos otro punto de interés, ya que al país de Wano llega nada más y nada menos que
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Se masca la tragedia, o quizá un valioso aliado contra Kaido. Continuará...