Tengo cierta inquietud.
Siempre he pensado que DC hacía cómics más adultos que Marvel (dentro y fuera de los supers), y que sus grandes clásicos universales son inferiores en cantidad, pero superiores en calidad.
Es decir; tomo por ejemplo el Batman Año Uno de Miller/Mazzu, y no encuentro nada parecido en Marvel. Obviamente, lo más parecido es el propio Miller en DD con Born Again, pero si bien Año Uno es uno de los cómics más rentables del planeta, con cierta categoría mítica y "aparte" de la colección regular, al Born Again por ejemplo, creo que le falta "entidad" en comparación, que pierde por ser parte de una colección regular, como si le faltara...especialidad, ser un punto y aparte. Como si Año Uno fuera Año Uno y Born Again parte de la serie de Daredevil, no sé si me explico.
Siempre que me da por pensar en los tebeos mejor hechos de Marvel, acabo volviendo a números especiales o limiteds aparte, pequeños oasis de realidad, de historias diferentes, que me atrevería a recomendar a cualquiera, lector o no de cómics, niño o viejo.
Será quizás que siempre he tenido el género de supers como un pecado culpable -igual que las pelis de Stallone o macarradas varias
- que me vuelve loco, y al que veo con buenos ojos desde la subjetividad, pero que no veo destacable en la objetividad.
Lo de siempre; si mañana charlo con mi profesora de teoría de literatura, si por ventura se me ocurriera recomendarle algo de cómic, por mucho que me guste Amazing o Uncanny, no se me ocurriría prestarle La saga de Fénix Oscura, o la trilogía de las drogas. En cambio ¿Año Uno? Joder, ya lo creo.
Creo que se trata más bien, de que siempre busco mezclar el género superheróico con algo más. Política, bélico, género negro. Algo que le de un calado algo mayor, y porque no, que encubra esa gran parida universal, que es evitar que Pinky y Cerebro traten de conquistar el mundo.
Supongo que seré el único al que le pasa.
Total, que la pregunta sería: ¿Por qué hay tan pocos buenos cómics de supers que no vayan de supers en Marvel?
Eso.