El problema es cuando el friki supera al escritor.
A mí me encanta Marvels, es uno de mis tebeos Marvel favoritos. Y nadie podrá negar que es un tebeo de un friki hecho para frikis, pero además es un tebeo bien escrito, obviamente muy bien dibujado, muy bien estructurado, con un planteamiento original y con unas historias muy bien construidas. Es decir, que aparte de la evidente conexión emocional con el lector Marvel de toda la vida, tiene mucho más que aportar
Con prácticamente el resto de obras de Busiek lo que me ocurre es que ese lado friki me lo encuentro siempre, pero de las virtudes de Marvels me encuentro pocas. En Astro City bastantes, en Siempre Vengadores algunas y en Vengadores o Iron Man, ninguna. Mucho aroma a naftalina, eso sí.
Thunderbolts es diferente. Vive del brutal impacto del final del primer número durante bastantes meses, pero le reconozco que cuando eso se agota, sabe buscar otros caminos con bastante oficio. No llega a emocionarme nunca, pero sí me divierte. Y eso es lo que más le echo en cara de sus Vengadores: que sean aburridos.
Como dijo una vez Rafa Marín sobre Quantum of Solace: “una película de James Bond puede ser mala, pero lo que no puede ser nunca es aburrida”. Pues lo mismo con un tebeo de los Vengadores.