Bueno manolo, en lo que a escenas tórridas respecta, llega un momento en que ya derrocha imaginación con descripciones tipo: "y lo hicimos en todas las posturas posibles"
El primero a mi también me resultó muy entretenido, el segundo más o menos, pero con el tercero me agobié como una loca. Me quedo con la serie con diferencia.
Lo simpático es que si te gustan (que eso, para gustos colores) las puedes leer sin spoilearte demasiado la serie, por que Ball juega con los lectores cambiando personajes y acontecimientos, dando curiosas vueltas de tuerca...
Dentro de ese estilo, y como clarísima inspiración, recomendaría los libros de "Anita Blake". Los dos primeros son estupendos, dentro de literatura de entretenimiento y eso, no nos confundamos. También están narrados en primera persona, pero la protagonista es mucho más interesante que Sookie: Anita trabaja como "levanta zombis" y ejecutora de vampiros en un mundo donde los vampiros son ciudadanos y tienen que cumplir las leyes. La narración es tipo "novela negra", con la protagonista como heroína durísima, que recibe constantemente y dada a meterse en la boca del lobo. Los vampiros son clasiquísimos: sexies, ambiguos, peligrosos.
La serie deriva en seguida a lo sentimental/sobrenatural y las intrigas pierden coherencia y protagonismo, y al parecer llega un momento en que la cosa se asienta en lo pornográfico y punto, pero lo publicado aquí por Gigamesh es una lectura de verano, o de "quiero desconectar un rato" muy recomendable.