Por cierto, a mí no se me ocurrió en la vida escribir a un correo.
A mí cuando era niño sí, pero era con el primer ordenador de casa, de esos que metían un ruido de la leche con el internet y te conectabas a tut-tut-tu-tu
Lo intenté, pero no se me daba bien, así que lo dejé estar.
Con los años, ya más adolescente y tal, sí que no se me pasó por la cabeza, porque no estaba ni mucho menos metido en el mundillo como ahora, y leía a rachas, a veces de higos a brevas.
En los últimos años, habré escrito dos veces, las dos para señalar guiños o detalles que se habían pasado por alto (True Detective en Rocket, La Bestia Blanca con Hopeless).
A mí sí que se me ocurrió, creo que hasta pensé mandar un dibujo, pero nunca me animé.
Ahora doy la brasa a Julián en el Marvel Age para compensar
Escribe hombre, escribe