Me acabo de terminar
Crisis de Identidad, de Brad Meltzer y Rag Morales.
Qué buenos fueron los 2000 para Marvel y DC. Es el perfecto ejemplo del tipo de cómics que se sacaban en aquella época. En este caso, Crisis de Identidad no se caracteriza, o eso creo yo, por un guion especialmente rompedor, pero sí por ser una historia muy buena.
Es el tipo de narrativa de misterio en la que
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Tampoco el guion se queda ahí, sino que Meltzer aprovecha para tocar ciertos temas, especialmente el de que cuando decides convertirte en héroe,
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Y eso, que siempre ha estado ahí y que Meltzer no descubre ni mucho menos, sí lo expresa de forma muy realista. Y ese tratamiento de la trama hace que, para mí, tengamos un universo DC más de carne y hueso. Cuando nos preguntamos a veces eso de "¿qué pasaría si los superhéroes fueran reales?" La respuesta está, al menos en algún aspecto relevante, en este cómic. Pasarían, en efecto, cosas como las que ocurren en este cómic. Y los héroes tendrían que enfrentarse a peligros que no suelen ser tratados tan a menudo en las viñetas.
Crisis de Identidad tenía fama de mainstream y puedo entender por qué. Es el cómic perfecto para una lectura autoconclusiva, ágil y rápida, donde se cuenta una historia con muchos dejes cinemáticos, sin que además tengas que saber absolutamente nada de DC. Ese era precisamente el giro que Marvel y DC experimentaron a comienzos de siglo, y Crisis de Identidad no es otra cosa que un exponente perfecto, y de los buenos, de los cómics tan geniales que se hicieron en aquella década.
¡Y viva el Pocket!