Día 291: The X-Men vol. 1 #125.19 de junio de 1979
Banda sonora: ya veis que se nos promete el regreso del Fénix. ¿Alguien duda de que hay que pinchar "She's Lost Control" del álbum debut de Joy Division?
https://www.youtube.com/watch?v=s4prQ11orEM
Créditos: Chris Claremont (guion); John Byrne (dibujo); Terry Austin (tinta); Tom Orzechowski (rotulación); Glynis Wein (color).
Portada de Dave Cockrum, Terry Austin y Gaspar Saladino.
Después del viaje épico a Polemachus, nos preparamos ahora para un viaje emocional, con muchas sorpresas y reencuentros. Abróchense los cinturones que llega un número verdaderamente importante. No hay más que ver la portada para deducir cómo convergen varias tramas río ahora.
La historia comienza en la Isla Muir. Moira realiza un chequeo a Jean y lo que detecta la asusta. Los poderes de la chica se salen de la escala. Y lo peor de todo es que Jean no solo no está cansada, sino que desea seguir liberando su poder sin que le provoque desgaste alguno.
Al mismo tiempo, nos hacemos cargo de lo mucho que han intimado ambas mujeres en el tiempo en el que Jean ha estado junto a Moira. Ella la ve ya prácticamente como una hija. Y como madre "adoptiva", se preocupa de las lecturas que detecta, aunque trata de disimular.
Es inquietante descubrir que Moira y Jean no están solas en el complejo de investigación. Los fieles seguidores de este club de lectura recordaréis a Angus MacWhirter, el rencoroso naviero que se había infiltrado en las instalaciones de Moira para volarlas por los aires. En su lugar, Angus encontró al Mutante X. Nosotros todavía no sabemos quién es, pero parece que, quien quiera que sea, ha tomado el cuerpo de MacWhirter, y está hambriento. Además, ese Mutante X parece conocer a Moira. Acecha a las dos mujeres, a la espera de comer algo. Pero el Mutante-X piensa que todavía Moira no debe saber nada.
Mientras Jean revive la odisea que ha pasado en las últimas semanas, y procesa cómo ha ido recuperándose poco a poco tras la muerte de su Scott, la acción cambia a la Sala de Peligro, al otro lado del Atlándtico, donde es precisamente Cíclope el que dirige los entrenamientos.
En esta ocasión, Scott es demasiado duro con su equipo. Primero les echa la bronca diciendo que han estado patéticos, logrando cabrear a Lobezno, que se pira. Pone la guinda comparando a la Patrulla actual con la original, diciendo a Tormenta que no son tan eficaces como la otra. Vamos a dejarlo aquí, porque la scomparaciones son odiosas.
Ya tenemos dos localizaciones. Pues vamos a por una tercera: el Asteroide M. En un inciso que Claremont introduce, y que quedará ahora sin respuesta, nos enteramos de que Magneto se ha refugiado en su Asteroide M, para recuperarse. Allí borra sus dolorosos recuerdos de Magda.
Pero claro, solo los borra de la pantalla, no de su cabeza. Con todos estos bruscos cambios de escena, tenemos la impresión de que Claremont está tejiendo una compleja historia con muchos hilos diferentes. Para muestra, un botón: la escena cambia ahora a Jason Wyngarde: se ha establecido en Stornoway, un pueblo de Escocia convenientemente cerca de Jean. Mente Maestra repasa algunos de los episodios de sus encuentros con Jean Grey, bajo diferentes apariencias. Observemos al mozalbete de las islas griegas, porque años después lo veríamos en CXM, como ya sabéis.
De solo una viñeta, Claremont sacaría petróleo en CXM, expandiendo la historia de cómo Jason Wyngarde manipuló a Jean Grey en su veraneo por Grecia. El objetivo de Mente Maestra es convertir a Jean en Reina Negra. Ahora no sabemos qué es exactamente eso, pero sí vemos un adelanto en una viñeta donde las proyecciones mentales de Wyngarade se funden con la realidad... ¡spoilers!
En las viñetas de estas páginas se contienen datos curiosos: por ejemplo, sabemos que no solo Arcade, sino también Mente Maestra, sabe la localización de la Patrulla-X. Se me ocurre que todo vendrá de cuando Juggernaut ya se encontró a la Patrulla en TXM#12, buscando a Xavier. Juggernaut contrató a Arcade en episodios pasados, así que le comunicaría la localización "secreta" de la Patrulla. Y de ahí saltaría de boca en boca. Magneto la descubriría más tarde, en TXM#16, así que asumiremos que le pasó la info a Mente Maestra. La base secreta ya no lo es. El incógnito de la Patrulla habría pasado a mejor vida, pese al énfasis que se hace en el secretismo de sus operaciones durante largos años tras estos sucesos.
Además, Claremont declara que el nombre de Jason Wyngarde es falso. Es decir, que realmente no se llama así. Sin embargo, sabemos que más adelante adoptaría ese "apodo" como nombre oficial. Y hasta llamaría con el apellido Wyngarde a su descendencia, si se me permite el spoiler.
Pero volvamos a la historia del día. Jean despliega sus enormes poderes sin esfuerzo hasta en lo más cotidiano. Delante de la pasmada Lorna, cambia de vestido con cada giro. Y sin embargo, Jean envidia la vida "normal" que Dane lleva con Alex, alejada del mundo de los superhéroes
Este es un número que contiene mucha más información relevante que acción. Moira vuelve a mostrarse inquieta. Da con la tecla de por qué, en su pasado encuentro con Magneto, a Jean le fallaron los poderes. Se activó una especie de interruptor psíquico para evitar su descontrol. De forma instintiva, Jean (o su clon, mejor dicho) inhibe sus poderes para evitar un apocalipsis.
Moira desearía que Xavier estuviera allí, lo que nos sirve en bandeja un nuevo cambio de escena, ahora a los confines de otra galaxia, donde Xavier vive un tanto ocioso entre los sh'iar, condenado a la irrelevancia pese a ser el consorte de la emperatriz.
En una biblioteca, Xavier repasa los sucesos relacionados con el cristal M'kraan. El enloquecido emperador D'ken provocó que la celosía que mantenía a raya el cristal se resuqebrajara, amenazando toda la existencia. Bastó el poder de Jean, ella solita, para reparar la celosía.
Las vidas de los miembros de la Patrulla son tan trepidantes que solo Xavier tiene tiempo ahora de reflexionar en el absoluto poder que tal cosa requeriría, en una aparentemente humana Jean. Teniendo un momento de revelación, decide volver a la Tierra. En la Isla Muir, Moira da con un diente de oro en el suelo. Raro, raro. Y está justo delante de la celda de Mutante-X... pero, no pasa nada porque los sensores indican que Mutante-X sigue dentro ¿verdad? Pues Moira se asegura y ¡sorpresa! No es así.
Jean detecta el pánico de Moira mentalmente, localizando su signatura. Y atención porque aquí pasan dos cosas que nos dejan con el culo torcido. La primera es que, de repente, la realidad cambia y Jean se ve en un entorno del siglo XVIII, lo que incluye su propio vestuario.
Seguidamente, la realidad vuelve a su sitio original, pero Jean apenas tiene tiempo de reponerse. El "zombie Angus" se le abalanza. Jean grita. Alex y Jamie la escuchan y corren a ayudar a la pelirroja. Lorna iba a unirse, pero se queda atendiendo una llamada intempestiva.
Lo que me gusta de estos cómics es cómo Claremont no nos deja apenas tiempo para procesar toda esta información. Inmediatamente la escena cambia a la Mansión, donde Bestia acude a comprobar por qué las alarmas que puso están desconectadas. Y allí se encuentra con ¡Rondador!
Y Rondador, claro, se teleporta atemorizado a la sala de peligro, donde, para variar, estaban sus compañeros, para decir que ah visto un fantasma. Pero no es ningún fantasma. La Bestia está viva, como lo está Cíclope. ¡Como lo está Jean! El reencuentro es muy emocionante.
Con esto, y la incómoda sensación de que, en todo este tiempo, Sean no se ha molestado en llamar a Moira, o bien no la ha localizado, o yo qué sé, se resuelve este nudo bizantino que tantos episodios llevaba coleando. Pero Jean todavía no se ha enterado de que Scott vive. Quien sí coge el teléfono es Lorna. Era la Patrulla-X desde el otro lado del charco. Así se entera Polaris también de que la Patrulla-X no murió en la Antártida. Poco tiempo tiene de compartir su alegría. El Mutante-X la sorprende en su choza. Lorna ya no responde al otro lado.
Pero, al menos, Dane ha logrado transmitir a sus compañeros resucitados que algo huele mal en la Isla Muir. No hay más tiempo. Los mutantes preparan el pájaro negro. Y les acompañara Hank McCoy. Con est ecliffhanger brutal y un número histórico apoteósico, nos despedimos por hoy.
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