EL OCASO DE LOS KIOSCOSMuchas veces hemos hablado de que los comics deberian reconquistar los kioscos, pero...¿Acaso queda algo que pueda ser reconquistado?
Durante décadas, los kioscos eran el punto de referencia de la prensa escrita, coleccionables (fasciculos o albunes de cromos), revistas y...tebeos.
Habia kioscos por todas partes: En todas las estaciones de Renfe (y el bar), en todas las estaciones de metro de Barcelona o Madrid (y en muchas de ellas un segundo kiosco en el mismo andén), y por descontado miles de kioscos más repartidos por todos los núcleos urbanos. A veces situados estrategicamente al lado de una parada de autobus, de un colegio, o incluso en la planta baja de edificios.
Pero han desaparecido en gran parte. En los últimos siete años se han cerrado por toda España 5.000 kioscos. En Madrid en el año 2017 cerraron nada menos que 200. En los últimos 20 años el 40 % de los kioscos han cerrado. Hoy en dia si uno se fija verá que ya no hay kioscos en las estaciones de Renfe (ni el bar), solo en muy pocas estaciones y sobre todo en las grandes (Sants, Atocha, Chamartin), siguen existiendo. En una extraña politica por parte de la Renfe de quitar de sus estaciones cualquier tipo de kiosco o tienda. En el metro (al menos el de Barcelona) ya no hay kioscos a pie de andén (seguramente por alguna ley que lo prohiba), y apenas en el bestibulo de la estación.
La gente lee cada vez menos, y si es en papel todavia menos. La ventas de la prensa impresa han caido un 50 % en la última década. Antes una persona que iba a trabajar por la mañana y cogia el tren o el autobus se compraba su periodico y se lo leia durante el trayecto, pero ahora solo tiene que consultar su movil y leer las noticias en directo, no las del periodico que son del dia anterior.
Hoy los kioscos que sobreviven son muy diferentes a los que pudimos conocer hace apenas 20 años. Ahora venden de todo un poco: Postales, chucherías, tabaco, hacen fotocopias, recargan tarjetas de telefonía...y siguen desapareciendo. Hace unos meses pude ver como desmantelaban uno de mis kioscos de juventud, donde compraba mis tebeos. De hecho, haciendo cuentas, enumerando 16 kioscos donde alguna vez llegué a comprar tebeos ocho ya han desaparecido. Y caerán más.
El kiosco se va...