Yo prefiero que la familia no me regale cómics, ya me los compro yo. Si me regalasen cómics se enterarían de los precios REALES, no los 10 o 12 € que les digo que me he gastado por tochal, o el eurico por grapa. Y si se fijan el precio, ese no es el verdadero, ante ellos todo tiene un descuento de +40%, es de segunda mano o saldo, aunque venga envuelto en plástico. Mi familia no son tontos, saben que miento con el precio, y yo se que lo saben, pero hay un delicado pacto de silencio y respeto mutuo, que se rompería si tuviesen a mano una factura o los movimientos de la tarjeta de crédito.