Nada prohibe vender juguetes en kioskos o viceversa revistas en jugueterías, si el epígrafe de actividad con toda seguridad sera el mismo (o casi por subepígrafe), la venta al por menor.
Poniendo el fascículo con otro producto, pasa a clasificarse como libro o publicación periódica, teniendo las empresas del sector de edición, distribución y venta de productos culturales bonificaciones, exenciones y beneficios fiscales, además de ayudas directas e indirectas en creación, edición, distribución, envíos y venta a las empresas. Lo más conocido es lo del iva y los envíos.
Si alguna vez se monta una empresa, un truco es añadir el epígrafe de edición a las actividades, para con la excusa de "publicar", y añadiendo un mini folleto que no sea mayoritariamente publicidad, beneficiarse de esa trampilla fiscal
Esto de los coleccionables está montado como un gran negocio en el que tienen estudiado todo estos detalles para hacerlos rentables.