He leído
The Amazing Spider-Man Nº 669. 1 y
Morbius el Vampiro Viviente Nº 1 -9.
En líneas generales, me ha perecido una lectura bastante entretenida. No obstante, como ha sucedido con la del Motorista Fantasma, comienza muy interesante, pierde algo de fuelle y tenemos un final donde se cierran todas las tramas de manera satisfactoria. Quizá lo más sorprendente, es el constante cambio de enfoque que le da Keatinge, el guionista,
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Por otro lado, se refuerza el desarrollo del personaje y su pasado, recontando su origen en la número de la colección del Trepamuros. Una buena revisión del origen que añade un toque de dramatismo a la infancia de Michael, dando sentido a su conversión en monstruo. También se potencia el intento de controlar su "maldición", la cual solo quiere desatar frente a los que realmente lo merecen. De forma que sus de sangre tenga objetivos lejos de la inocencia de las víctimas habituales de los vampiros, enfatizando sobre su lado de antihéroe, que al fin y al cabo es en lo que se convierte ne esta serie. De todas formas, este concepto no se desarrolla demasiado, y quizá sea un acierto, ya que fue el motor de su serie en los noventa, etapa que de alguna forma es homenajeada aquí. Desde luego, el tratamiento del personaje es bastante acertado y el resultado final no ha estado del todo mal. Por cierto, atento al cameo de la Legión de los Monstruos.
Aunque Gárgola ya ha apuntado un poco de que va la serie, os dejo una pequeña síntesis para que os hagáis una idea de la complejidad de la trama que urde el autor.
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Como podemos ver, las tramas están muy elaboradas con el denominador común de que todo tiene una relación directa con el protagonista. Aunque cabe destacar la introducción constante de la conspiración y el misterio, con algún que otro giro inesperado. No deja de ser otro componente de interés en una serie muy bien hilvanada.
En el apartado gráfico tampoco está nada mal. Tenemos a Richard Elson, que hace un buen trabajo, que va de menos a más. En los últimos números está muchísimo mejor. En algunos números es sustituido Valentino De Landro, cuyo estilo más minimalista también encaja con el ambiente sórdido de la serie, aunque me quedo con Elson, cuyo estilo me gusta más.
En definitiva, estamos ante una serie que, pese a estar inédita en nuestro país, tiene una lectura muy entretenida, quizá ofrece menos reflexiones y conceptos que la del Motorista, pero que igualmente plantea cuestiones interesantes y algo fresca en el explotado mundo de los vampiros científicos. Quizá me ha llamado la atención como Morbius llega a ser un superhéroe al uso, en una mezcla entre el Punisher y Héroes de Alquiler, con una ayudante que le atiende las llamadas e acudiendo en defensa de los ciudadanos indefensos, incorporando un manos libres a su vestuario. Incluso Max Model le confecciona un "uniforme de batalla". Quizá pueda parecer una barbaridad, pero está bien integrado en la trama. Hasta tendrá una imagen suya a modo de símbolo.
No obstante, sigue siendo una serie para las minorías de lectores que nos van los segundones del Universo Marvel, algo que sabe atender muy bien el guionista con los guiños y las menciones que vemos a lo largo de la colección. Quizá sea una gran lectura para ese perfil de lector, y una lectura entretenida y curiosa para el resto. Sea como sea, yo he pasado un buen rato, que no es poco.