Día 168: Amazing Adventures vol. 2 #13. Julio de 1972
Banda sonora: "Lifting the mask from a local clown/Feeling down like him/Seeing the light in a station bar/And traveling far in sin". Es el comienzo de "Parasite" de Nick Drake, y así es como Mente Maestra usa a la Bestia. Un verdadero parásito:
https://www.youtube.com/watch?v=qQlMBqdKWb4
Créditos: Steve Englehart (guion); Tom Sutton (dibujo); Frank Giacoia (entintado); John Constanza (rotulación); ¿? (color).
Portada de John Romita y Sam Rosen.
En capítulos anteriores: Hank cree haber matado a Iron Man, y corre a refugirarse a un bosque cercano a las instalaciones de la Brand Corporation. En realidad, todo ha sido un engaño de Mente Maestra, para aislar a la Bestia y atraerla a la Hermandad de Mutantes Diabólicos.
Solo que en este número aprendemos algo más: Mente Maestra no solo ha creado una ilusión con sus poderes mutantes: también ha provocado amnesia a la Bestia, por obra y gracia de sus poderes, bastante formidables, sin duda, aunque todavía tendrían más potencial que desarrollar con cierta pelirroja...
Las facciones de Wyngarde son verdaderamente diabólicas. Un acierto de Sutton, creo yo.
Para hacer que la Bestia salga de su escondite, Mente Maestra crea una ilusión de fuego. El atormentado Hank sale del follaje para huir, pero Unus y la Mole le cortan el paso, de forma que el desafortunado prota acaba atrapado sin escape, como una bola de pinball, entre los dos. Mole no puede ser movido y Unus repele lo que toca, así que entre los dos lo tienen dando bandazos como si fuera de goma el pobre
.
Finalmente, cuando la Bestia se calma, Mente Maestra le convence para que se una a la Hermandad. Bestia, un tanto reticente, acepta la propuesta y se va a vivir al circo con ellos. A tener en cuenta que los malos no saben que esta Bestia es la de la Patrulla, y Hank tiene amnesia. Un verdadero juego de doble ciego. Y eso que a Jason le da por preguntarlo, no vayamos a tener un disgusto. Qué cosas
Mientras, una pareja muy especial ha llegado a las oficinas de la Brand Corporation con la encomienda gubernamental de investigar la trama de espionaje. Se trata del Capitán Buzz Buxter y su esposa ¡Patsy Walker! Pero Hank no está en su oficina, lo que levanta la primera sospecha.
Interrogan brevemente también a la malvada Linda Donaldson, pero esta no sabe nada. De hecho, no quiere que "La Bestia mate a Hank" porque su espionaje se vería frustrado. Tampoco ella sabe de la verdadera identidad de nuestro héroe oscuro.
Ante el resultado infructuoso de estas pesquisas iniciales, lo que hacen Buzz y Patsy es irse a buscar a Hank a su domicilio, pensando que tal vez esté en peligro. Buzz está a punto de abrir la casa con una ganzúa, pero Patsy le disuade por razones éticas. Y menos mal, porque la máscara de Hank estaba en medio del salón y su secreto hubiese quedado expuesto.
Atención a la chica que vemos aparecer mirando el apartamento de Hank desde la distancia, y viéndose marchar a la pareja en coche. Nos permitiremos hacer un pequeño spoiler para decir que se trata de Vera, nuestra querida bibliotecaria, quien había tenido un romance con Hank en los primeros tiempos de La Patrulla-X sesentera.
Tendremos que aguardar a siguientes entregas para saber más de Vera. De momento, Jason Wyngarde pretende utilizar a la Bestia para que, con su poder acrobático, penetre en una mansión para robar un gran diamante, sorteando las alarmas. Una ilusión de Jason les hace invisibles, de forma que pueden ir a mangar en pleno día y a la vista de todos. Muy conveniente.
Una vez tenga el diamante en su poder, Mente Maestra planea venderlo varias veces utilizando el poder de sus ilusiones, y de esa manera hacerse rico para "ayudar a la causa mutante". Hank piensa que eso está mal, pero aun así decide seguir adelante con el plan.
Y atención a cómo se pone en marcha el plan: Bestia se coloca entre Unus y la Mole y sale disparado cual pastilla de jabón adelante: recordemos otra vez: Unus repele todo lo que toca y la Mole no puede ser movida, así que la fricción hace su trabajo y Hank entra a la mansión por una claraboya
Una vez con la joya en su poder, Bestia tiene sus dudas sobre si entregarla a Mente Maestra. Este le "convence" con una de sus ilusiones mentales, pero, al usar su poder, descuida la ilusión de invisibilidad, y unos obreros les ven salir de la nada. Da la casualidad de que los obreros son bastante anti-mutantes, y recuerdan al "alto" (no sé si es Mente Maestra o Unus) de un enfrentamiento previo. ¿Alguien quiere ganar un no-premio con esto? Yo ahora mismo no caigo.
Sea como sea, Wyngarde se deshace de ellos con una ilusión monstruosa
Pero Mente Mestra no se saldrá con la suya. Una vez de vuelta en los carromatos del circo, Bestia recupera, poco a poco, pero con claridad, su memoria. Y entonces ahora sabe de la villanía de los que creía aliados. ¡Son sus enemigos de toda la vida! Así que ataca sin pensárselo.
Mente Maestra deja al buen McCoy a los "cuidados" de dos tipos como Unus y la Mole, a los que difícilmente ganaría con la fuerza bruta. Pero no contaba con la inteligencia de Hank. Logra atraer a los dos patanes a una jaula de animales, y los encierra tras saltar sobre ellos cuando están dentro.
Lo divertido del tema es que, al estar los dos juntos con muy poco espacio, como Unus repele todo lo que toca y la Mole no puede ser movida -digámoslo por tercera vez-, rebotan entre sí constantemente sin que puedan destrozar la jaula
Estos dos ya no molestarán por una temporada.
Hora, pues, de ajustarle las cuentas al malandrín de Jason Wyngarde. Este se emplea a fondo, lanzándole a Hank todas las ilusiones que puede y más. Pero ya es tarde. Una vez descubierto el truco de Mente Maestra, McCoy ya es inmune a sus visiones.
Dicen que tanto va el cántaro a la fuente que se rompe. Al ver que Bestia se le acerca y logra vencerle, Mente Maestra sufre un shock, de forma que sus propias ilusiones acaban afectándole ahora a él, en un peculiar efecto rebote. Acaba balbuceante y enloquecido, presa de monstruos imaginarios. Y Hank hace lo que debe hacer. Llama a la policía para que recojan a los malos, dejando también allí el diamante, de paso, para que sea devuelto por las fuerzas del orden. Y así acaba esta historia, con Hank alejándose sin sentir una pizca de lástima por el malhechor de Wyngarde.
La verdad es que en un solo tebeo hemos tenido una historia bastante autoconclusiva del periplo de Hank con la Hermandad. Cierto que ya comenzó al final del capítulo anterior, pero aquí es donde coge toda la fuerza. El punto flaco de la historia para mí es que Bestia pierde y recupera su memoria un tanto aleatoriamente, casi que diría que gracias al supremo poder del guion, cuando resulta conveniente.
Mientras, quedan pendientes las tramas de Vera y de Patsy.
Pronto, muy pronto, en estas crónicas mutantes. Leed conmigo, y luego descansad, si podéis.
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Tema: Crónicas Mutantes II: el Club de Lectura para Hijos del Átomo (Leído 101969 veces)