Buenísimos estos comentarios, me estoy riendo un montón (gracias).
En mi caso, os cuento que en la habitación donde íbamos a guardar los comics mi mujer insistió en que éstos aparecieran ordenados de manera armónica, o sea, los lomos ordenados por tamaños, colores, etc. No veáis como sufría al ver mis colecciones desordenadas, ya que mi idea era agruparlar por personajes/colecciones (como debe ser).
Al limite del divorcio
admití su ordenación para, sigilosamente a partir de ese momento, ir cambiado cada día algún tomo sin que se diera cuenta... estoy en ello, casi los tengo ya todos; y es que una vez pasado el momento inicial, no se fija ya.