Yo me metí los cuatro tomos por vena en poco más de un fin de semana. Toca relectura, algún día quizás no muy lejano, porque ahora lo que más se me viene a la cabeza son fogonazos: un tipo con un maletín, gente con una suerte de mierda, un vendedor de helados, un jugador de dados, un trompetista de jazz, el gustirrinín de ir juntando el puzzle poco a poco y un final que me dejó un poco más frío de lo que debiera (aunque esto no quiere decir nada porque, como ya he dicho varias veces por aquí, no hay serie de Vértigo cuyo final no haya generado críticas negativas, y al final todo depende del lector).
Para mí gusto, y considerando los comics de Vértigo como un género en sí mismo, de las series que más me han gustado del sello (aunque hay unas cuantas, la verdad).
Y para un aficionado al género negro esto es un must-have como una casa, sin duda.
