Para comics de revival, por lo que a mi respecta, me quedo antes con Tierra X y Siempre Vengadores, bueno, y con Watchmen, claro está.
Uff, pero es que yo creo que son rollos totalmente diferentes.
Tal y como yo lo veo, hay dos formas de leer Marvels:
1) Desde el punto de vista del lector más o menos nuevo o poco versado en Marvel. Hola, soy Phil Sheldon, soy periodista, he descubierto a los prodigios y voy a narrar la incidencia que estos han tenido en mi vida, desde su aparición hasta el día en que me di cuenta de que no eran tan infalibles como creíamos.
2) Desde el punto de vista del lector veterano que se ha pasado años leyendo cómics. Hola, soy Phil Sheldon y a lo largo de la obra voy a ser tú, que un día descubriste a los héroes de papel y éstos pasaron a formar una parte importante de tu vida, desde su aparición hasta el día en que descubriste que no eran tan infalibles como creías.
En el primer caso me parece un tebeo muy chulo, escrito con mimo, con una devoción escrupulosa hacia la continuidad y exquisitamente dibujado.
En el segundo, me parece un ejercício precioso de autoreferencia, una carta de amor al lector de cómics que tal vez necesitaba en aquel momento que le recordaran por qué esos prodigios se habían convertido en algo tan importante para él. Y visto así, creo que la lectura cambia de enfoque radicalmente.
Un día, si te apetece, vuelve a leer Marvels. Y hazlo con ese enfoque en la cabeza, con el de la autoreferencia. Piensa que tú eres Phil, y que cada escenario en el que se mueve es uno de esos tebeos que leiste a medida que ibas creciendo. Tal vez cuando termines sigas teniendo la misma sensación hacia la obra, y me parece perfecto, que coincido en que cada lector es un mundo y la verdad universal sobre lo que es bueno o malo empieza y acaba en uno mismo. Pero también cabe la posibilidad de que la veas con otros ojos y la disfrutes de otra forma.
Si tienes el tebeo en casa, yo creo que te merece la pena probar