Comprar online no es ser desleal, ni malo. El que pueda o quiera que compre, dentro de lo malo, es importante mantener la actividad normalizada, con precauciones. Pero aprovecharse de una situación tan seria para conseguir ventaja si es desleal. Convertir la tienda web de la editorial en un monopolio de facto es muy desleal, un golpe a tiendas especialmente las pequeñas o con poco músculo económico, que no pueden vender con normalidad, ni online ni con servicio de recogida o reparto local.