Por mi parte me he leído el primer volumen de 7 para la eternidad, una de las últimas obras que llegaron a España por parte de Rick Remender y que cuenta con dibujo de Jerome Opeña.
En esta nueva serie de Remender, el famoso guionista norteamericano nos presenta un mundo de fantasía que hace tiempo ha sucumbido a una fuerza del mal, el dios de los susurros o el rey del lodo (depende de a quien le preguntes usara un nombre u otro) Este mundo vive en una guerra que agoniza y que parece que pronto llegara a su fin con la victoria final del dios de los susurros.
Alejada de la batalla vive una familia que ha sido proscrita y que intenta mantenerse lejos del conflicto pero que tras sufrir un ataque no tendra mas remedio que involucrarse en la lucha, una lucha que abandonaron hace mucho. Así pues, Adam Osidis, que debido a una enfermedad ve cercana su muerte, se vera inmerso en una misión en la que intentara acabar con el dios de los susurros, limpiar el nombre de su familia y mantenerlos a salvo.
Antes de comenzar la lectura de este tomo no esperaba demasiado del mismo, en mi mente habia calificado esta obra como una obra menor de Remender y lo cierto es que no andaba muy desencaminado. Cierto es que esperaba algo mas entretenido y si soy honesto he quedado decepcionado con lo mostrado en estos primeros cuatro números USA. Me cuesta bastante encontrar virtudes en el trabajo de Remender, en mi opinión bastante soso y muy lejano a lo exhibido en el inicio de otras de sus series como Clase Letal o Ciencia Oscura.
En la parte gráfica Jerome Opeña esta bastante por encima de su compañero y hace un gran trabajo, con su espectacular estilo aunque es una lastima que el guión no aproveche tal despliegue. Por ponerle un pero a Opeña, creo que se lia un poco en alguna escena de acción y narrativamente no me parece nada del otro mundo, pero aun así su arte es espectacular y esta muy por encima de la media de la obra.
Este tomo lo pille por 8 euros y no pillare el segundo salvo que encuentre una ganga y ese día me sienta benevolo. Muy decepcionado me quedo con esta obra, no creo que me pierda nada si la mando al olvido.