He leído un par de historias de las recopiladas en el libro 75 años de Superman. Concretamente, son:
- Action Comics #644 (1989)
- Action Comics #775 (2001)
Curiosamente, los dos relatos reflexionan sobre el papel de Superman, la responsabilidad que tiene el personaje, las consecuencias del abuso del poder...
El #775 se enmarca en la etapa de Joe Kelly como guionista de Action Comics. Este autor llegó en el #760 (1999) y lo dejó en el #812 (2004). Es una etapa ciertamente a reivindicar, aunque sufre el mismo problema que los otros autores contemporáneos de Superman: como las cuatro series estaban estrechamente relacionadas, prácticamente formaban un continuo crossover y apenas dejaban espacio a los guionistas para contar sus propias historias. En el caso de Kelly nos encontramos, eso sí, con algunos momentos puntuales en los que gozó de verdadera autonomía: el 775, el 800... Creo que es en esos cómics donde podemos apreciar el estilo de Kelly, su visión del personaje y lo que quiere contar. Por cierto, que también hizo el #836 (2006) que fue el último número antes del relanzamiento post-Crisis Infinita. Digamos que Kelly, junto a Jeph Loeb, empezó el relanzamiento del año 2000, y él mismo también lo cerró en 2006.
Reconozco que el #775 siempre me ha dejado un poco frío. Entiendo que La Élite es, digamos, una versión de The Authority, que en esos tiempos era un grupo de muy popular, y sirve de excusa para poner a Superman en el eterno debate de si hay que matar a los enemigos y acabar de raíz con el problema, si hay que buscar alternativas y llevarlos a prisión y tratarlos... Me vienen a la cabeza situaciones similares en Kingdom Come, donde el Magog liefeldiano se convierte en el principal héroe y Superman opta por retirarse, o Injustice, serie en la que las circunstancias llevan a Superman a adoptar un papel mucho más agresivo y violento. Así es que lo que aquí plantea Kelly está bien, es interesante, encaja con el personaje... pero realmente no es nada original. Y lo peor es que el desarrollo de la historia tampoco es apasionante, siendo algunos pasajes algo confusos, tal vez por la forma en que están escritos. Los miembros de La Élite son realmente odiosos y sus diálogos son tan ácidos y tóxicos que, si bien transmiten la mala leche que tienen, se hacen pesados de leer.
El otro comic es el #664. En este caso nos remontamos a 1989, cuando Action Comics acababa de recuperar a Superman como prota principal... y es que durante una temporada se retituló Action Comics Weekly y contó con otros personajes. Aquí tenemos un equipo de lujo: Roger Stern y George Pérez (DEP). Me imagino a estos pensando en el marrón que les dejó John Byrne cuando se fue de un día para otro: que si Superman había matado a los kryptonianos, que si había una Supergirl de protomateria... muchos cabos sueltos que atar. En este comic resuelven el tema de Supergirl. Resulta que Matrix, que es como realmente se llama este ser, ha contactado físicamente con el Erradicador, un objeto que le transmite los recuerdos de Superman hasta el punto de hacerle creer que es él. Así es que Mae se cree Clark Kent / Superman y en sus erráticas acciones pone en peligro a los Kent y a Lana Lang, por lo que Superman interviene y terminan librando un enfrentamiento chulísimo, con una coreografía brutal de Pérez... El falso Superman, por cierto, adopta un traje negro y gris que nos puede recordar al Superman trillado de Christopher Reeve y que puede ser un avistamiento del futuro traje negro y plateado. Finalmente, Mae abandona la Tierra, curiosamente cómo poco antes lo había hecho Superman al matar a los kryptonianos, ambos sintiéndose culpable de sus acciones. Stern y Pérez se quitaron así de encima un personaje con el que seguramente no sabían qué hacer.