Yo estoy en un extremo, Oscar, pero no te das cuenta que en otro mismo extremo estás tambien tu.
Siempre estamos con el producto generalista, con el producto popular, la grapa , el producto barato...demonizando a los que no queremos que el tebeo sea un subproducto ninguneado culturalmente, una mierda para el consumo de raritos. Mucho, pero muuuucho han luchado autores por hacer lo más digno posible el medio, por hacerlo un paso más allá del producto solo infantil, aquel "donde hoy hay tebeo, mañana habrá un libro " que el gran Carlos Giménez respondio "donde hoy hay tebeo, mañana habrá UN TEBEO MEJOR "
Ahora para leer, que es lo importante, existen millones de maneras para hacerlo, el tebeo está más al alcance que nunca.
Tienes una variedad nunca vistas, tebeos para todas las franjas de edad, tebeos para cualquier tema...el tebeo ha crecido en dignidad, en calidad y en formato de edición.
Puedo entender que algunos solo querais leer ( aunque sería tener, poseer... ) cantidad, tebeos al kilo, pero también debeis entender que existan lectores ( y digo lectores, de los que leemos ) que quieren que las ediciones sean lo mejores posibles. Y eso no quiere decir que sean grimorios ( edición que para nada me parece destacable ) si no ediciones como lo nuevo de la Espada Salvaje. Material restaurado, extras interesantes de creación, extras de material gráfico, buena traducción, buen papel, tamaño original magazine, encuadernación decente, precio ajustado...
Seguramente ninguno, por estar en los extremos tengamos razón, pero deformar jibarizando en tapa dura a precio caro no tiene sentido ninguno. Bueno, solo uno, que ECC se frote las manos...
Estoy plenamente de acuerdo con tu postura.
Me llama la atención que con frecuencia se aducen argumentos que tachan el cómic de producto de derribo, de usar y tirar, para justificar las tropelías que se hacen al editarlos (reducción de tamaño, mutilación de números, ausencia de color...). Es como "oye, que estamos hablando de cómics, tampoco hace falta una edición extraordinaria". Yo veo evidente que el género o el medio no condiciona la calidad del producto. Claro que se publican muchos cómics que son morralla, pero no en mayor medida que películas malas se estrenan cada semana o libros pésimos llegan a las librerías. Lo excelente es raro y lo mediocre abunda, en cualquier arte del que hablemos. Pero eso no es excusa para maltratar el producto.
Creo que el trabajo por dignificar el cómic pasa también por defender políticas editoriales que sean lo más respetuosas posibles con el arte de los autores. Esto no quiere decir ni tapa dura, ni grimorios, ni megatochales, sino formato acorde con la publicación original.
De todas formas, al margen de la dignificación del medio (que entiendo que no todo el mundo ve la afrenta en estas prácticas), yo sí creo que la experiencia lectora se resiente con la reducción de tamaño, aunque no la haga imposible. El caballero oscuro de Miller o el Wonder Woman de Pérez en jíbaro (no digamos ya en pocket) me parece bastante criminal, teniendo en cuenta el número de viñetas de algunas páginas, el arte de los autores, etc.