Mis impresiones con notas del segundo tomo:
1- Alter Ego (de Ana C. Sánchez, serie abierta) -> dos números en lugar de uno, lo cual es bueno; pero una trama que se va tornando más genérica y previsible, lo cual es malo. A destacar el dibujo, muy expresivo, y el personaje de June, bastante conseguido, carismática de un modo natural. No obstante, las trazas de su pasado que se van mostrando ya me aburren sin conocerlas, y la derivación de la trama es bastante simplista, pierde la mordiente de su primer número, que apuntaba a una mayor (aunque no mucha) complejidad. Mi nota es un 6,5.
2- Gryphoon (de Luis Montes, serie abierta) -> mejora lo previo, y lo cierto es que es un número perfectamente solvente. El dinamismo de la prueba que debe afrontar la protagonista está muy bien plasmado, hay diseños chulos (los monstruos destacan) e incluso el humor consigue funcionar, algo que no cuajó en ningún momento en su debut. Por otra parte los diálogos son bastante ramplones (los de la protagonista directamente malos) y el dibujo tan pronto funciona como falla estrepitosamente. Dentro de su irregularidad, diría que ha quedado un capítulo apañado y válido. Otro 6,5.
3- Ikigai (de Sara Soler, historia corta) -> buena premisa, muy mala puesta en escena. El dibujo podría haber funcionado de no ser por su absoluta ausencia de personalidad y la estupidez de caricaturizar a sus personajes por momentos. Ídem con el desarrollo y los diálogos, que terminan de rematar cualquier posibilidad de brillantez de la historia. Fuera de eso, a nivel amateur, funcionar funciona. Cumple sin más. Un 5,5.
4- Good Game! (de Blanca Mira y Kaoru Okino, serie abierta) -> de un número para otro la serie pierde el ritmo, el humor y gran parte de su frescura. Hay un interesante giro de guión, pero todo es tan atropellado que apenas afecta al lector (al menos en mi caso). El dibujo no destaca, los diálogos no enganchan y queda patente que no hay un gran conocimiento de videojuegos en la obra. Un decepcionado 5 para este número.
5- Uroboros (de Ernest Sala, primera parte de dos) -> una agradable sorpresa en cuanto a dibujo y desarrollo, a pesar de partir de una premisa muy simple (a la espera de su segunda mitad). Por otra parte es demasiado breve, y no entiendo en absoluto que se divida. Ni siquiera se queda en un punto interesante. Le doy un 6,5.
6- Pigüi (de Santi Casas, historia corta) -> el súmmum de la indiferencia. No aporta absolutamente nada al lector. Cabría esperar mucho más de Santi Casas. Además, adolece de varias faltas de ortografía sangrantes. Un pufo en toda regla. Le doy un 3.
7- Wing (de Senshiru, serie abierta) -> todo está mal. Todo. La trama es horrenda y carente de interés, los diálogos son como para tirarse por el balcón y el dibujo como para arrancarse los ojos. Lo siento, no me gusta ser hiriente con autores probablemente amateurs, pero mi vida seguramente sería un poquito mejor si no me hubiese parado a leer esto. Un 1.
8- Mangaka (de Ana Oncina, historia corta) -> si en la entrega pasada hablé bien del trabajo de esta autora, pese a no ser de mi estilo, aquí debo resaltar su apabullante falta de interés. Historia intrascendente, sin una narrativa que destaque ni puntos a su favor más allá de un dibujo correcto. Un 4.
9- Meadow Queen (de Risu Risu, serie abierta) -> aquí es cuando he empezado a preguntarme qué he hecho yo para merecer esto. Como punto a favor diré que puede mejorar (muy fácilmente), ya que a priori este número puede tener entre poco y nada que ver con el grueso de la trama. Como punto en contra, todo lo demás. Mención especial a los diálogos, que invitan a dejar de comprar la revista para siempre. Un 2,5.
10- Shion (de Alba Cardona, serie abierta) -> consigue el increíble mérito de empeorar en todo a su número previo, que ya era pobre de por sí. A estas alturas cabe preguntarse si las historias a publicar se van escogiendo en base a un estándar de progresismo y ninguno de calidad, porque van un buen puñado de historias que tienen en común el lesbianismo desatado y la no menos desatada ausencia de talento. De por sí el número es tan mediocre que me costaría quedarme con un solo defecto, así que no intentaré resaltar ninguno. Un 1,5.
11- Aron-Fire (de Álvaro Jaudenes, serie abierta) -> mátame, camión. El resumen ya de por sí invita a saltarse la historia en tan solo una página, pero para el que tenga el valor o la estupidez de seguir le aguardan su insufrible trama, su horroroso dibujo, sus apoteósicamente malos diálogos, sus muchas faltas de ortografía... su todo, vaya. Un 0 como un castillo.
12- El monstruo (de Ken Niimura, historia corta) -> ah, Niimura... Volvemos a encontrarnos. Bien, al igual que en Examen, la narrativa es tan mala que invita a pasar directamente de él; pero al contrario que en Examen, aquí creo que he conseguido pillar algo. Y ni eso amerita el tiempo que tarda en leerse. Podría ser mucho mejor de lo que es, pero, como no es así, le voy a poner un 3.
13- La historia del manga (de Marc Bernabé y Marian Company, serie abierta) -> que tostón, que humor tan mediocre, que personajes tan insufribles, que manera más retorcida de explicar algo que debería ser interesante para el lector. No veo talento en ninguna parte. Niimura puedo decir que al menos lo intenta, pero es que Bernabé no sé si esto lo escribe mientras caga o qué le pasa. Un 2,75.
14- La historia del manga en España (de Oriol Estrada y Marian Company, serie abierta complemento de la anterior) -> con nostalgia no basta, ni mucho menos. El número anterior tiraba de eso, pero también de una narrativa muy cercana y progresiva, con un final que rozaba lo poético. Aquí no hay nada de eso. Nostalgia (muy bien usada, eso sí) y ya. Un 5,5.
Nota media: 3,80Un desastre. Cuando dos series cuyos inicios fueron simplemente "buenos" (Alter Ego y Gryphoon) y la primera mitad de una historia corta la mar de sencilla (Uroboros) se convierten en la cúspide de la revista, sabes que ha muerto en tan solo su segunda entrega.
Colecciones prometedoras que se vienen abajo (Good Game!), autores que pasan de firmar buenos trabajos a hacer mediocridades (Santi Casas), un repertorio de series abiertas sencillamente
aterrador, una selección de trabajos cortos sin ninguna chispa...
Muy triste que en España se publique tan poco material patrio y que cuando se haga sea este. Si sigo adelante, será exclusivamente por este hilo. Decepción absoluta