¿Que tienes que hacer? pues continuar la historia donde el forero anterior la haya dejado. La idea es que ire poniendo aqui todos los fragmentos para que se pueda ir leyendo entera del tiron asi que intentad evitar emoticonos y cosas asi Comenzamos:
La historia de los hombres
Una fría tarde de febrero, despues de salir de trabajar, Steve cojio el coche para dirigirse a una cerveceria con sus amigos a la cual iba todos los miercoles.
Sin embargo, uno de los colegas del grupo no bebía alcohol. Para él, no había nada como una buena cocacola hipercongelada, que lo consideraba el billete de viaje al placer ideal.
Este pequeño detalle hacía mella en un miembro caprichoso del grupo, el cual no soportaba la idea de considerar el desfalco de que ese miembro no se uniese a la fiesta alcoholica de sus camaradas, pero los demas lo veian normal despues de que la primera y ultima cogorza de Pete, que asi se llamaba el chaval, acabase tirandole los trastos al camarero. Por lo que el grupo siempre se consideró muy unido, pero viendo esta pequeña brecha, ¿cuan unidos estarán en el momento más crítico del grupo?
Nunca antes, Steve, Pete y sus dos otros compañeros de fatigas, se habían encontrado en una situación parecida, el local no tenia ninguna mesa disponible. Ellos siempre se sentaban en una mesa que estaba en una esquina, y desde la que se veia un gran ventanal que daba a la calle. Pero esta vez la mesa estaba ocupada por un grupo de mujeres pelirrojas que no paraban de beber Foster, la cerveza favorita de los chicos. Y alli estaban ellos sin saber que hacer, pues no solian tratar con mujeres, la mayoría de las mujeres con las que habían tratado eran lesbianas con las que chateaban en Terra cuando ellos mismos se hacían pasar por mujeres.
Pero esto era nuevo para ellos, hecho que una vez fue conocido por un amigo del grupo, hizo que éste estallara en una sonora carcajada, como es lógico.
Y ahí seguían ellas, en todo su esplendor mujeril.
Roderik, el más apuesto del grupo (casi sin un sólo grano en la cara) fijó sus ojos en la más atractiva de las mozas, y en como una gota de Wite Label se deslizaba por su boca llegando lenta y ondulantemente hasta sus pechos... viendo en ella una escena que le recordaba demasiado a familiar a sus recurrentes fantasías masturbatorias nocturnas con Marie Jane Watson. Observaron a las bellas mujeres mientras se preguntaban que hacer.
-¿y si buscamos otro sitio?
-¡Que dices Steve, tu estas loco!
-Por lo menos doy ideas Brian
Todos los amigos de la peña esta sabían lo raros que eran por, además de lo anteriormente mencionado, el hecho de que tenían nombre de guiri, cuando ellos eran de Arbasete. Sin duda, lo exótico de sus nombres podría ser un punto a favor para conquistar a esas féminas pelirrojas de pechos prominentes, las cuales estaban empezando a pensar en abandonar el bar, ya que habían empinado el codo bastante por aquella tarde.
Los chicos, mientras observaban la situación, notaron que el mundo a sus pies se movía, probablemente estaban siendo trasladados a otro sub-mundo, lo cual era una muestra de que abusaban de la lectura de tebeos y películas de ciencia ficción.
O igual no abusaban tanto....
- Brian para !-Pronunció Steve tajantemente, con un impetu que denotaba que no era la priemra vez que clamaba una orden.
-Tranquilo Steve, nadie se da cuenta, ¿no te cansas siempre de estar a la defensiva?
-¿y tu Pete no te cansas de tu cocacola hipercongelada?
-solo quería divertirme, comentó el rubio del grupo, casi entre dientes
- Brian sabes lo que opino de eso desde lo de Alicia y Américo.....
-Alla paz chicos, hemos salido a divertirnos, y esas pelirrojas nos lo piden a gritos.- soltó roderik tan panchamente como campechano lo es el para disminuir tensiones.
Mientras, Dylan no decía nada. Estaba mirando el atarceder por la ventana, que daba al puerto, con la ópera de Sydney al fondo. Mientras estaba anonadado mirando a través del ventanal, sospesaba si llevar a edición su quinto libro de poemas, o dejarlo todo y irse de allí, lejos.....
- Al Camerún - pensaba con los ojos entreabiertos, mientras oía sin escuchar las vociferaciones de sus cuatro compañeros sobre montarse no sé dónde o tirar a no sé quien
El Sol seguía cayendo inevitablemente
-¿Que pasa helmanos no van a pedil nada o que?-dijo Adan, el camarero negro del bar
- Para mí, una piña colada - dijo Steve, al que le pirraba cualquier cosa que acabara en colada, sobretodo si lo tomaba hacindo la colada.
Pete añoraba el Coffee Bean y se pidió un capuchino, mientras que Brian y Roderik pidieron una Foster's. Dylan, más cerrado en si mismo, pidió al camarero un gintonic sin burbujas, con dos cubitos y una pajita, de la que sirven para beber, de color azul y blanco.
Y alli estaban los cinco de pie esperando que alguien se fuese para sentarse en una mesita, mientras hablaban de cosas frikis como sus partidas al WoW, al LoL, al juego de barrabas...
Al final las 5 pelirrojas se marcharon y dejaron la mesa libre, nuestros protagonistas no dejaron pasar la ocasión de ocupar la mesa al instante y rápidamente, mientras Steve cargaba con su piña colada y se metía con Pete por tomar un capuchino y no una coca cola hipercongelada como de costumbre, Dylan se apresuraba por llegar primero a la mesa para así poder coger un asiento cercano al ventanal para poder disfrutar de las vistas al igual que de la compañía de sus amigos, Brian y Roderick iban de últimos, Brian ni se fijó en las pelirrojas pero Roderick sí, y justo la pelirroja de ojos verdes y pecosa, con un sujerente top roo que dejaba entrever unos voluminosos pechos le guiñó picaramente un ojo.
Roderick se sentó el último y no pudo dejar de voltearse para echar un último vistazo a la pelirroja, la cual se mezclaba en la salida del bar con sus amigas, donde ya no parecían tan dulces, había un halo en ellas de misterio, detalle que Roderick paso inadvertido inmiscuido en la pelirroja. Pero Roderik no pudo resistir la tentación. En él creció un deseo irrefenable y, excusándose con la excusa de ir al excusado, salió por la puerta y siguió lejanamente a la pelirroja del top. Con la Foster's en la mano Roderik tenía una mala vibración. El halo de misterio que envolvía al grupo de chicas fue tornándose más tétrico, pero Roderik, lejos de desfaceller en su inetnto, las siguió hasta llegar a una encrucijada. En la esquina derecha, había un solar maltrecho lleno de columpios oxidados; en la esquina izquierda, un bar de mala muerte de cuyas ventanas luchaba por salir una sórida luz; en las esquinas de enfrente, dos bellos edificios simétricos. A uno de ellos se dirigía el grupo de féminas.
Roderick al verlas sonrió pues pensó que al haber doblado la esquina las iba a perder, pero contó y en el grupito ya no había 5 pelirrojas eran 3, ¿donde estaban las otras 2?es más¿donde estaba la del top rojo? y de repente, algo le golpeó en la espalda con una increíble fuerza. Roderick salió despedido un par de metros, y cuando pudo incorporarse vio que sus malas vibraciones no habían sido infundadas. Ahí estaban dos pelirrojas imponentes:
-La pelirroja del top rojo ya no tenía el top que marcaba tanto sus voluptuosos pechos, llevaba en su lugar una gabardina de cuero negra hasta las rodillas abotonada que seguía marcando su voluptuosos pechos, acompañado de unas botas negras de tacón de aguja fina, en su mano portaba una pata de cabra
-La otra chica pelirroja calzaba las mismas prendas pero acompañada de unas gafas de sol y un bastón que semejaba pesar un kintal, por lo que Roderick supuso que sería de hierro fundido por lo menos. Roderick pensó "¿como leches levanta esa pedazo de barra?", ese fue su último pensamiento pues enseguida otra fuerza arrolló sin contemplaciones su cráneo.
CAPITULO 2
En el bar, los 4 amigos comenzaban a preocuparse por Roderik. ¿Se estará liando con una chati en el WC? , pensaban. Además, tenían el pacto tácito de enviarse un sms si eso tenía lugar. Pero ya hacía más de una hora que lo habían perdido de vista. El ánimo de los muchachos iba aminorando y los litros de alcohol absorbidos eran rápidamente anihilados. Dónde estaba Roderik? En su móvil sólo aparecía la voz fría y neutra del contestador. Estaban preocupados.
-Steve...,Steve...,¡Steve!-gritó Brian
-¡Lo sé !-contestó
-se que prometimos no volver a hacerlo desde lo de Alicia y Américo, pero ..., es Roderick-le dijo Brian.
-Dylan eres el "sintiente" vete al WC- ordenó Steve
-Pero ya miramos y Roderick no está allí
- Lo sé, pero es el único sitio donde te puedes concentrar, intenta sentir su "halo identificativo", Pete sondeo psíquico !
-¡Allá va mi capuchinno!- pensó Pete
-Yo puedo intentar sentir sus pasos mediante la vibración de Gaia y...- dijo Brian
-¡No!-gritó Steve, pero se dio cuenta y fue bajando la voz- eso llamaría bastante la atención rubiales, deja que trabajen los más "delicados". Esto no me huele bien.
-jajajaja Steve a hecho un chiste, que jodío, ¡como tiene sentidos superdesarrollados!- reía Pete
-Pete, no hemos visto a Ro desde hace una hora, no es momento para reirse.
-Este sufre de colon irritable, te lo digo yo- le susurró a Brian.
Brian se quedó mirando para Pete y no sabía si reir o si llorar sabiendo lo que ocurriría si dejase salir sus emociones.
- Pero bueno.... es que nadie piensa en Roderik? - chilló Steve- ¿es que a nadie le importa?. - Dejó de un golpe su vaso sobre la mesa y se giró, dirigiéndose hacia la puerta. - Me voy a buscar a Roderik ..... y necesitaré ayuda - les espetó - Dicho esto, se fue no sin antes olvidarse de dar un buen portazo.
-oye helmanos, otro portaso mas y no vuelven pol aqui ¿me entienden?- les dijo desde detras de la barra Adam- y ya me estan pagando oigan, que la ultima ves se me fueron sin pagal.
Mientras, en otro lugar el teniente Tanaka estaba hablando con su CSI predilecto, el doctor Ferb, cuyo análisis del cuerpo de un misterioso desconocido con el cráneo abierto aún no había comenzado.
-¿Que tenemos Ferb?
-Verá teniente, apenas he comenzado con el cuerpo, a priori le digo que es varon, caucásico, de entre unos 20 y 25 años de edad.- le contesto el CSI al teniente mientras esperaban al forense Phineas.- A priori le puedo decir que la victima ha sufrido un grave traumatismo en el parietal, con un objeto cilindrico probablemente. Habra que llevarlo al labo y limpiar la herida porque con tanta sangre poco puedo decirle, ademas no quiero que se contamine el cuerpo.
-gracias Ferb- dijo Tanaka mientras se encendia un puro y se dirigia a su coche.
Cuando fueron asaltados bruscamente por un grupo de 4 hombres que rapidamente se llevaron el cuerpo, sin dejar rastro
cuando Phineas y Ferb se dieron cuenta padecían una laguna de los últimos minutos, no sabían que hacían allí, se quedaron perplejos mirando atónitos el uno al otro, algo les mosqueaba, pero ¿el qué?
Mientras los 4 asaltantes que no eran más que Peter, Steve, Dylan y Brian miraban el cuerpo de Roderick
Peter tembloroso preguntó: ¿está muerto?
claro que no! dijo Brian, no se nos mata con una fuerte lesión craneal, no le han robado su "esencia de poder", ¿sabeis donde tenemos que ir verdad?
entonces los 4 se miraron sabiendo a donde se tenían que dirigir, sin que ninguno de ellos quisiese tener que realizar ese cometido, pero Roderick era de los suyos.
- Lo primero que tenemos que hacer es buscar transporte aereo - dijo Steve - El único lugar donde podemos ir está a muchos kilómetros que aquí.
-Y si invocamos a "Dagus" imortus del "sueño eterno", comento en un leve susurro Dylan que cayó como un trueno ensordecedor en los oidos de sus otros tres compañeros.
-No!-acertó tajante Steve,- no podemos correr el riesgo del "cambio" que nos pida
-Pues por Roderick podemos jugarnos el pescuezo- aceleró Brian en un acto reflejo por salvar la vida de su compañero
-¿Y si nos pide a cambio la vida de uno de los 4 por llevar a Roderick al destino que queremos también te juegas el pescuezo rubiales?- espetó sereno y cínico a la vez Steve.
Una vez más el silencio asoló a los jóvenes...
Visto eso, Steve cogió la iniciativa y llamó a un colega que le debía un favor. Cogió el móvil y marcó apresuradamente el número. al otro lado de la linea, una voz que parecía surgida del fondo de una honda y oscura caverna, respondió:
- Cuánto tiempo, Steve !!!
- Hola, T.C. . Te dije que te llamaría sólo en caso de emergencia ... tenemos una ... y gorda. Tienes que llevarnos a Lompoc ...
- Pero..... sabes lo que te costará que te lleve a California? -gruñió TC
- Y tu te acuerdas del favor que me debes? - gritó de repente Steve - Si no fuera por nosotros, ya sabes donde estarías. O no?
El silencio se apoderó de todo. Parecía que el tiempo se había parado en ese mismo instante. Hasta que finalmente, la voz grave de TC sonó débilmente desde el auricular
- Sí, me acuerdo, pero lo que me pides es demasiado. No puedo llevar un cadáver sobrevolando todo el Pacífico en un bimotor.
- Sí puedes -le espetó Steve - Y lo harás
CAPITULO 3
TC era un expiloto del ejército de Estados Unidos en Iraq. Se licenció con honor y el destino lo llevó a Nueva Zelanda, donde fundó una empresa de excursiones a bimotor. Se ganaba la vida llevando a curiosos por las islas del sur del Pacífico y a la Antártida. Siempre explica la anécdota de aquel chileno que quería ver osos polares. Inaudito !!!
TC era un buen piloto. De origen africano, su familia descendía de una de las más famosas tribus del Sudán, los dinka. TC se sentía siempre orgulloso de ello y en cualquier momento lo encontrabas explicando como su bisabuelo llegó un buen día al puerto de NY y, luego, su familia se trasladó y se instaló en Boston. Después de Iraq, se retiró con su amigo Dean a Nueva Zelanda, dejando su pasado en norteamérica y empezando una nueva vida en el hemisferio sur. Juntos montaron el negocio de las excursiones, un negocio que zozobró al cabo de dos años con la muerte en un accidente de helicóptero de su amigo Dean.
Steve conoció a TC en un bar de marineros de dudosa reputación en Whangarei, en la región de Northland, comenzaron a hablar al ver que los dos tomaban cerveza de la misma marca: " la garrapata roja" cerveza de dudosa reputacion al igual que el bar, comenzaron a hablar y acabaron en una pelea de la que salieron convertidos en autentticos camaradas. Aunque lo que de verdad les unió fue el que los dos estaban enamorados de Christine Palmer, la enfermera de noche que les curó las heridas de aquella titánica pelea en la playa y la cual no aguantaba las constantes bromitas a costa de su sobrenombre.
Ese fue otro golpe duro para TC pues depués de perder a Dean vió como Christine Palmer también desaparecía de su vida, sin saber porqué, en circunstancias misteriosas pues una vez registrado su ático se vio que no había recogido nada y su gata Hellgotes seguía en le piso, la cual a partir de ese momento se quedo a cargo de TC
Esa imagen siempre le hizo gracia a Steve, el ver siempre a un hombre negro corpulento acompañdo en su regazo de una gata persa color canela, le daba un toque......menos terrorífico a la vez que cómico
Sorry but you are not allowed to view spoiler contents.
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y porqué no me soprende ::)
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