He visto Heridas abiertas (Sharp objects).
Sobresaliente. Una de las mejores series que haya podido disfrutar hasta la fecha. Perfectamente medida, con interpretaciones de auténtico lujo (Amy Adams es escandalosamente buena, a su nivel habitual, pero lo de Patricia Clarkson es para quitarse el sombrero), una escenografía y desarrollo que coge lo mejor de Twin Peaks pero deja en el plato su exacerbado tono onírico y su falta de coherencia interna, una duración autocontenida y un estilo solo apto para los más exquisitos paladares.
Me encantaría que series como esta fueran las que arrasaran en las ceremonias de premios, y no los brozazos fanserviceros como Juego de Tronos. Ojalá reciba el reconocimiento que merece.