He leído
Sleeper Nº 4: el largo camino a casa.
Llegados al final, Brubaker no solo me ha convencido, sino que me ha maravillado de principio a fin. La serie ha ido prácticamente en un
in crescendo continuo para concluir en un desenlace que combina muy bien el típico "final feliz" con la tragedia que ha rodeado desde el principio a la historia de Holden Carver. Sinceramente, creo que poco puedo añadir a lo que ya he expuesto en anteriores comentarios, pero más allá de todo eso, me ha sorprendido mucho ver como los autores han partido de una base superheroica para construir algo mucho más cercano al
noir y, por supuesto, una historia de espionaje cargado de suspense y tensión al más puro estilo de Brubaker. No creo exagerar un ápice si digo que estaría entre mis tres obras preferidas del autor hasta el momento. También cabría destacar el arte de Sean Phillips, que se mimetiza perfectamente con el ambiente que pretende transmitir el guionista consiguiendo imbuirnos de ese tono oscuro y criminal que nos sumerge en este mundo creado por ambos autores en el que los argumentos dan increíbles giros y nada es nunca lo que parece. En esta fase final, hemos podido observar en varias ocasiones como se mantiene el suspense, sin que tengamos del todo claro de que bando está el protagonista, hasta que se desencadena la tragedia, lo cual nos lleva un nuevo punto de partida hasta el final.
Aunque es obvio que el punto fuerte ha sido la caracterización de los personajes y esa narrativa en primera persona, la cual nos lleva introducirnos en la piel de Carver y sentir lo que el siente casi de manera simultánea, el propio autor señala dentro de este aspecto una relación que ha sido en cierta forma el eje de todo. Nos referimos a la turbulenta relación entre Miss Misery y Carver, la cual ha estado salpimentada con violencia, sexo duro y mucha desconfianza. La química entre ambos personajes nos ha permitido soñar con un final feliz, además de ayudarnos a entender como un hombre perdido entre dos mundos necesita buscar un apoyo. En ese momento surge la figura de la
femme fatale, aunque con ligeras diferencias al modelo que suele presentar Brubaker en sus obras de género negro. Esta mujer es posiblemente uno de los personajes más interesantes, presentando una alegoría de lo mal que puede estar el mundo cuando solo la depravación y la violencia son capaces de mantenernos sanos. Desde luego, es una reflexión sobre una sociedad que prefiere salvarse a sí mismo antes que ayudar al prójimo. Miss Misery es una creación tan interesante como compleja que a medida que avanza la obra se perfila como una de las piezas claves para entender la evolución y las dudas que surgen en Carver. Sin duda, una pareja tan explosiva como mortal de necesidad. Cuando dos personajes funcionan tan bien juntos surge la magia y es en gran parte responsabilidad de ellos que esta obra atesore tanta calidad como la que posee. No solo es una lectura recomendable, sino que me atrevería a decir que es imprescindible.
Para terminar, se ha incluido un especial relacionado con
Coup d'Etat, un
crossover del universo de Wildstorm, totalmente independiente de la historia principal de la serie, pero en la que intervienen el elenco de protagonistas de
Sleeper. Curiosamente, me esperaba algo peor, me ha parecido mínimamente entretenido, principalmente porque amplia un poco de información sobre la dimensión de la que procede el artefacto que dio los poderes a Carver, así como una conspiración en la que intervienen Tao y el Gobierno. al final no deja de ser una versión moderna de una invasión extraterrestre, pero debido a la implicación de los personajes de esta serie resulta más o menos digerible, aunque es el punto de partida de una historia mayor que no se incluye y que introduce a Authority, tal y como vemos en la escena final. El dibujo corre a cargo de Jim Lee, no en su mejor momento precisamente, y parece ser una forma de publicar un recopilatorio lo más completo posible con todo lo relacionado con Sleeper. No está mal como extra, ya digo que tiene algunos punto de interés, pero tampoco hubiese pasado nada si lo hubiesen obviado. Pero, bueno, es una forma de concluir el viaje de Holden Carver que, después de un largo trayecto, parece haber encontrado el camino a casa, quizá ahora pueda ser feliz eternamente. O no, quién sabe...