Tarde o temprano, tenía que llegar
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RESEÑA Neo Parasyte F, de Hitoshi Iwaaki y varias autorasRESEÑA Neo Parasyte F, de Hitoshi Iwaaki y varias autoras
“Era antiguo alumno de tu madre. Ella me enseñó algo muy importante.”
Neo Parasyte F (
Neo Kiseijū F) es un recopilatorio de historias breves realizadas como homenaje por distintas autoras de
josei y
shōjo y ambientadas en el mundo del manga
Parasyte (creado por
Hitoshi Iwaaki), o partiendo de la premisa de dicha serie sobre los seres parasitarios. Las historias fueron serializadas como 15 capítulos en la revista
ARIA de
Kodansha entre septiembre de 2014 y enero de 2015 para posteriormente ser recopiladas en un solo volumen. Las artistas implicadas, realizaron un único capítulo, de extensión variable, que contenía una historia autoconclusiva en las que ellas se encargaban de guión y dibujo. Estas artistas son:
Asumiko Nakamura,
Ema Tōyama,
Miki Rinno,
Lalako Kojima,
Kaori Yuki,
Banko Kuze,
Yūki Obata,
Kashio,
Yui Kuroe,
Asia Watanabe,
Mikimaki,
Hikaru Suruga,
Hajime Shinjo,
Renjūrō Kindaichi y
Yuri Narushima.
La publicación de Parasyte en Japón entre 1989 y 1995 supuso un considerable revuelo; su autor, Hitoshi Iwaaki, estaba concibiendo una obra que no tardaría en ser conocida como “el manga perfecto” por su calidad, duración y solidez, pero que sus virtudes iban mucho más allá de eso al crear una historia en la que elementos como el terror, los problemas medioambientales o la validez y ética del espíritu humano se fusionaban entre sí para generar una narración que funcionaba a distintos niveles. Parasyte, acumuló muchísimos aficionados y supuso una lectura impactante para muchos de ellos, incluyendo niños y niñas y adolescentes que algunos de ellos, a día de hoy, se han convertido en mangakas.
Ya hablé de Parasyte extensamente en su reseña,
que podéis leer aquí, no en vano este manga es, junto con
Fullmental Alchemist, mi manga favorito, pero no está de mal recordar un poco el argumento de dicha serie (antes de hablar de Neo Parasyte F), en la que una especie de gusanos invadían los cuerpos de personas tomando el control de su cerebro. Una vez instalados en sus huéspedes, estos seres parasitarios se dedicaban a devorar a otros humanos para saciar su apetito. En este contexto, nos encontrábamos con Shinichi Izumi, un estudiante de instituto que había sido atacado por un parásito, pero que no pudo llegar a su cerebro, quedándose atascado en el brazo derecho de Shinichi y comenzando así una extraña relación de simbiosis. Por supuesto, este parásito no es otro que Miggy.
A partir de ahí, Parasyte abría todo un mundo de posibilidades y dilemas morales, un contexto del que podían emerger numerosas historias distintas, pero de las que sólo vimos las que Iwaaki nos quiso contar, dejando cerrada así una obra redonda. Pero las posibilidades seguían ahí, y en 2014 comenzaron a publicarse dos antologías de historias cortas inspiradas en el universo de Parasyte; Neo Kiseijū (Neo Parasyte M) y Neo Kiseijū F (Neo Parasyte F). Ambas series homenaje estaban compuestas por historias autoconclusivas realizadas por distintos mangakas. En el caso de Neo Parasyte M, el enfoque se hacía desde el shōnen y el seinen, mientras que en el caso de Neo Parasyte F la perspectiva venía del shōjo y el josei.
Centrándonos en Neo Parasyte F, tenemos quince historias distintas que se mueven por derroteros muy cambiantes; unas tienen cierto tono de humor, otras se centran en lo romántico y la mayoría tratan el tema de los parásitos como una amenaza patente que suele marcar la conclusión de su trama. La verdad es que, con tanto material distinto, la calidad es muy variable, haciendo que el cómputo general sea un poco complicado de valorar, puesto que ha habido capítulos que me han gustado bastante y me han parecido muy interesantes, y también ha habido otros que valoraría como directamente malos.
Empezando por lo malo, para acabar por lo bueno, creo que el problema de muchas de estas historias es que, en vez de adaptar las características del shōjo al mundo de Parasyte, pretenden adaptar el mundo de Parasyte a las características del shōjo, o mejor dicho, que componen una historia dentro de los parámetros de su demografía e incorporan tangencialmente el contexto de Parasyte. De esta forma, los lectores que venimos aquí atraídos por el hecho de ver nuevas ideas e historias inspiradas en la obra original, nos encontramos con historias insulsas y sin contenido, en ocasiones demasiado predecibles e incluso aburridas.
La verdad es que es una lástima, porque creo que la combinación de Parasyte con el shōjo puede dar lugar a premisas realmente interesantes (como alguna que vemos aquí), sin nada que ver con algunas de estas historias que no son nada más que tópicos en un contexto distinto. El problema, creo que viene por algo que mencionaba anteriormente; todas las mangakas implicadas comentan el gran impacto que tuvo para ellas el manga de Hitoshi Iwaaki, y el gran honor que suponía el poder participar en este homenaje. Evidentemente eso no es algo malo de por sí, pero la cosa se complica cuando ese cariño y admiración por la obra principal se convierte en un exceso de respeto e incluso miedo de hacer algo que no esté a la altura o que pueda alterar la historia original. De hecho, una autora (Yūki Obata) comenta que tenía pensado hacer una historia radicalmente distinta, planteando una especie de “¿qué pasaría si cierta cosa no hubiera pasado?” pero al conocer a muchos fans de Parasyte no se atrevió a desarrollarla e hizo una historia que para mí resulta mediocre. Y lo que más me fastidia es que su idea inicial me parece tremendamente interesante, y habría dado para un relato magnífico, que ojalá pudiera leer.
Al final, ese respeto y admiración, juegan a veces un papel que pone al autor en una situación complicada que les hace ir a lo seguro y fácil, pero perdiendo una oportunidad única de jugar con un mundo cargado de posibilidades. No pretendo denostar la calidad o el potencial de algunas autoras, de hecho, comprendo su posición y además un relato corto en un homenaje no es indicativo del trabajo de nadie, pero no sé… me habría gustado ver este volumen repleto de historias rompedoras, que hablaran de ciertos personajes desde una perspectiva distinta, que se viera un poco en el futuro, o que hicieran la historia que quisieran pero empleando realmente todas las herramientas que ya están ahí y a las que se les puede sacar mucho partido.
Pero bueno, también hay historias en esta recopilación que merecen mucho la pena, las que más me han gustado (no quiere decir que sean las únicas que he disfrutado) son las siguientes: la que abre el tomo, a cargo de Asumiko Nakamura y que cuenta una historia turbia pero con cierto cariz sugerente sobre una tienda en la que se venden parásitos y un cliente que está desesperado por conseguir uno. Banko Kuze se desmarca un poco de la seriedad del Parasyte original y crea un pequeño sketch de cuatro páginas en tono humorístico que me ha resultado bastante simpático. El capítulo de Kashio, que se centra un poco en la amistad o incluso amor entre dos estudiantes me ha gustado, por la manera en la que maneja la intriga y el punto de interés. La de Renjūrō Kindaichi también me ha gustado pese a su corta extensión, por ese guiño que se hace al personaje de Ryōko Tamiya, reconociendo su vital importancia en la evolución de Shinichi. Para acabar, precisamente la última historia me ha parecido de las mejores, ya que pone el foco en el padre de Shinichi y nos muestra gran parte de la historia original desde su punto de vista, ayudándonos a conocer su perspectiva y su forma de pensar y de ser. Precisamente este relato es lo que yo esperaba de todos; una ampliación o un acercamiento a la obra original pero con la frescura que aporta un nuevo creador trabajando con las creaciones de otro autor.
A aquellos que se pregunten si Neo Parasyte F es un buen punto de entrada para leer posteriormente Parasyte, yo les diría que no, pero además de forma bastante rotunda. Es cierto que se pueden leer estas historias sin conocer la fuente original, pero creo que están pensadas para el que ya ha leído Parasyte. En ningún momento se va a explicar como funciona el tema de los seres parasitarios, de dónde proceden o cómo pueden llegar a no tomar el control de un cerebro. Se puede deducir, claro, pero no funcionan igual, si se conoce el material original sí que se va a poder disfrutar sin complicaciones. Además, varias historias no se pueden entender o apreciar sin conocer a los personajes implicados en ellas, por lo que desaconsejo totalmente el iniciarse en Parasyte con este volumen. Lo mejor es leer Parasyte y ya está, que además son únicamente ocho tomos y es una maravilla.
¿Se lo recomiendo a los que hayan leído Parasyte? Pues no podría recomendarlo al 100%, el motivo es sencillo; como decía anteriormente, la calidad de las historias fluctúa demasiado, y aunque hay historias interesantes y otras decentes, también las hay que se me han hecho aburridas e incluso tontas, o que me han parecido directamente malas. Es esta falta de consistencia en el nivel del contenido lo que me hace ser un poco prudente a la hora de recomendarlo, pero creo que la solución es la siguiente: recomiendo Neo Parasyte F a aquellas personas a las que les guste Parasyte y sean muy fans del shōjo, o a aquellas personas que, como a mí, les fascine Parasyte y su mundo y necesiten algo más, aunque sea sólo este poquito.
En conclusión, estoy un poco decepcionado con este Neo Parasyte F, por culpa de ese gran potencial que tenían estas historias y que en muchos casos ha sido totalmente desaprovechado. Pero al mismo tiempo estoy contento con la lectura porque me ha dado algunos relatos muy interesantes, que en ciertos casos compartía espíritu con la obra original. Mi valoración global diría que es positiva pero sin demasiados alardes, las buenas historias compensan las malas pero por poco. Espero que Planeta Cómic se anime a traernos pronto Neo Parasyte M, para ver con qué nos sorprenden los autores y autoras implicados en ese homenaje, ya que parece a priori que un enfoque desde el shōnen y el seinen es más sencillo de armonizar con Parasyte.
Apartado GráficoAl tratarse de un manga con 15 autoras distintas, comentaré muy brevemente por orden de aparición qué me ha parecido el arte de cada una sin extenderme porque sino se hará eterno:
Asumiko Nakamura: El estilo de Nakamura me ha encantado, no sólo por lo único que resulta, con todo ese contorneado, la ausencia casi total de sombras y lo desgarbado de sus figuras, sino por esa claridad a la hora de narrar, con expresividad y una limpieza increíble.
Ema Tōyama: En vez de aplicar su propio estilo, la autora ha hecho algo que me parece muy loable: intentar imitar el estilo del autor original, Hitoshi Iwaaki. El resultado dista mucho de ser perfecto, hay ciertos errores y un acabado sucio y tosco que se aleja de Iwaaki, pero me ha resultado simpático ver esta imitación.
Miki Rinno: El arte de esta autora es muy limpio y conciso, conjugando una estética más típica del shōjo con el impacto que suponen las alteraciones físicas provocadas por los parásitos. Muy correcto, aunque en alguna ocasión se hace ligeramente confuso a la hora de seguir la acción.
Lalako Kojima: Esta mangaka tiene un estilo muy amable, que hace que lo que dibuja quede entre algo simple y mono, tendiendo a evitar dibujar fondos siempre que puede. Personalmente no me dice mucho, pero es funcional.
Kaori Yuki: El estilo presentado en su historia me ha recordado levemente al de Obata en Death Note, especialmente en el personaje masculino y ese toque más oscuro o gótico del dibujo, aunque es inferior al de la obra anteriormente mencionada. No sé si habrá sido culpa del dibujo o del guión, pero esta historia ha sido un poco confusa.
Banko Kuze: En apenas cuatro páginas, he tenido suficiente para ver un estilo muy resultón, que recuerda al de Iwaaki pero con un cariz más dulcificado y cómico. Me ha gustado mucho.
Yūki Obata: No tengo demasiado que decir del estilo de Yūki Obata, no me ha gustado pero es algo más personal, ya que me ha parecido algo “ñoño”… para gustos los colores, como siempre.
Kashio: Al contrario que en el caso anterior, el dibujo de Kashio me ha gustado bastante, gracias a un estilo que tiene bastante síntesis y una ligera elegancia que le va muy bien.
Yui Kuroe: Esta autora no me ha terminado de convencer, ni para bien, ni para mal, su estilo me ha parecido muy estándar, sin nada diferenciador que llame la atención, insulso excepto la última viñeta (que es un homenaje en toda regla)…
Asia Watanabe: El dibujo de esta mangaka tiene un acabado bastante bonito y “cuqui”, no me termina de gustar su forma de narrar, pero es solvente.
Mikimaki: Esta autora también se ha lanzado a imitar el estilo de la obra original, pero simplemente se queda como eso, un intento.
Hikaru Suruga: La verdad es que el dibujo de Suruga tiene mucha fuerza y personalidad, y consigue transmitir con dinamismo y efectividad. El fallo que le podría achacar, por mi parte, es en los rostros, y por una cuestión de gustos personales, ya que las proporciones que utliza no me convencen del todo.
Hajime Shinjo: Quizá los ojos que emplea me parecen excesivamente grandes para el tamaño de sus rostros, pero lo compensa con una narración decente y expresividad.
Renjūrō Kindaichi: Un dibujo simpático en la mayoría de las viñetas excepto cuando en la última página aparece cierto personaje adulto en primer plano; entonces el dibujo parece bastante amateur.
Yuri Narushima: El estilo de Narushima me ha gustado mucho, por su forma de trabajar con lo íntimo de su historia, dándole la medida correcta de expresividad a cada personaje en cada momento, pese a que en alguna viñeta puntual pueda estar un poco desdibujado.
Como resumen general, en el apartado gráfico pasa lo mismo que en la historia en sí; hay muchas autoras y muchas historias, y por ello habrá algunas cosas mejores y otras peores. Se nota que el estilo viene bastante dirigido por la demografía en la que trabajan las autoras, pero eso contribuye a darle una frescura distinta al mundo de Iwaaki al verlo con una perspectiva bastante diferente.
EdicionesPara leer este Neo Parasyte F, hay dos opciones; la edición americana, a cargo de Kodansha USA y la edición española, a cargo de Planeta Cómic.
Yo he optado por la edición patria de Planeta Cómic, y la verdad es que la calidad del formato me gusta mucho; la encuadernación es en rústica con sobrecubiertas, siendo el material de las sobrecubiertas de un tacto muy agradable, el tamaño es B6 (12 x 18 cm), que es mi favorito para el manga, y la reproducción de los contenidos y diseño del tomo me gusta mucho. Como fallo sí que destacaría que no se han incluído las distintas portadas a color, que habría sido un toque genial. Mencionaría como virtudes que tiene índice y que al final de cada historia se incluye un breve comentario de cada autora sobre lo que ha supuesto participar en el homenaje, así como obras de cada una de ellas para que puedas leer más de una mangaka si te ha gustado su trabajo.
Lo que sí que creo que es muy mejorable es el precio, que en este caso son 11,95€ por 288 páginas. Sólo con pensar que los tomos de la serie original de Parasyte tenían más o menos la misma paginación, además de páginas a color y costaban 9,95€, la comparación pone en evidencia que quizá se hayan excedido con el precio…
Tema: Post oficial: Dudas y recomendaciones Manga (2ª parte) (Leído 188050 veces)